Ick, la nueva expresión de moda que rompe relaciones

Las redes sociales son claves en muchas relaciones de parejas. Por ello, diversas personas recurren a ellas para narrar sus sentimientos y experiencias, con el objetivo de encontrar perfiles que hayan pasado por una situación similar.

Así se ha hecho viral la expresión Ick, que hace referencia al sonido que se utiliza cuando algo te desagrada o produce rechazo, se traduciría como un 'puaj'. Bajo el hashtag que hace referencia a este sonido, muchas personas han narrado el motivo que hace que sus parejas les produzcan en ocasiones esta sensación.

Este paso del amor al rechazo se produce en cuestión de segundos. Por ejemplo, escuchas comer a tu pareja, algo que incluso te parece tierno, y de repente no puedes dejar de procesar ese ruido molesto que hace. Siempre lo ha hecho; sin embargo, ahora lo odias, al igual que su manera de estirarse por las mañanas o de sonreír.

Si te ha pasado alguna vez, eres víctima del síndrome de la repulsión súbita. Los gestos o costumbres, que llegan a generar asco, pueden ser muy sutiles y pasar desapercibidos para el resto de personas. Sin embargo, logran romper el enamoramiento o los sentimientos positivos que estabas creando hacia una persona.

El Ick suele ocurrir tras la primera etapa de enamoramiento, cuando baja la dopamina y se deja de idealizar a la otra persona. En ese momento, se empiezan a apreciar sus defectos y manías, aunque algunas al sufrir este síndrome resulten inaceptables y comiencen a producirte rechazo.

Que se produzca el Ick es más difícil en las relaciones largas, puesto que también es más complicado que los miembros de la pareja se sorprendan mutuamente. Sin embargo, en las cortas es muy complicado que haya vuelta atrás. Cuando se coge asco a una persona a la que todavía estás conociendo, no se suele encontrar una parte positiva que compense este hecho y se pierde el interés por seguir con la relación.

A la hora de romper una relación por este motivo, hay que tratar a la otra persona con delicadeza y responsabilidad afectiva. Aunque se haga desde la sinceridad, no se debe mencionar el asco, sino que se tiene que gestionar con respeto e intentando no dañar su autoestima. Estas actitudes o decisiones que nosotros odiamos, puede que otra persona ame, por lo que no se debe tratar con desprecio y son tan lícitas como otras que nos encantan.