Carolyn Hartz, la mujer de 74 años que lleva 30 sin consumir azúcar

A finales de los años 90, a Carolyn Hartz le diagnosticaron pre diabetes. En ese momento tomó una drástica decisión: dejar de consumir azúcar, y ahora, cumplidos los 74 años, está mejor que a los 40.

En una entrevista publicada en ‘Daily Mail Australia’, Hartz aseguró que “al principio fue difícil porque era adicta al azúcar, pero creo que es una de las razones más importantes por las que he podido mantenerme saludable y en forma”.

Así, no solo siguió las recomendaciones de su médico para controlar sus niveles de azúcar en sangre, sino que tomó la determinación de cambiar por completo sus hábitos alimenticios, desterrando todos los azúcares y los alimentos que los contenían de su dieta. Además, fundó su propia marca de productos sin azúcar, Sweetlife, y se ha convertido en toda una influencer de vida saludable.

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Hartz ha publicado varios libros de recetas sin azúcar, como ‘Sugar free baking’, en los que demuestra que es posible hornear deliciosas tartas, pasteles y todo tipo de postres, sin añadirles azúcar, y también comparte, con frecuencia, sus recetas en sus redes sociales.

Carolyn Hartz decidió reemplazar el azúcar por el xilitol, un edulcorante presente, entre otros, en los chicles sin azúcar, derivado del abedul, que aporta un sabor dulce pero tiene un tercio de las calorías del azúcar, y ningún efecto sobre los niveles de glucosa.

Aunque en sí no es una sustancia potencialmente peligrosa, sí es importante tener en cuenta que el abuso del xilitol puede producir diferentes problemas digestivos e intestinales, como gases, distensión abdominal o diarrea, y está totalmente contraindicado en personas con patologías relacionadas con el aparato intestinal, como el síndrome del colon irritable.

Además de mantener el azúcar lejos de su vida, Carolyn Hartz, que a sus 74 años es la orgullosa abuela de cuatro nietos, también se cuida manteniéndose activa a diario. El deporte es parte importante de su vida, al igual que la meditación y el descanso: la australiana asegura que dormir bien y las horas suficientes es otra de las claves de su envidiable estado de salud, así como de su aspecto: nadie diría al verla que está a punto de cumplir tres cuartos de siglo.