Esther Gómez, enfermera: "El ibuprofeno y el paracetamol son dos fármacos diferentes"

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Esther Gómez, más conocida en redes como Mi Enfermera Favorita, ha vuelto a ofrecer una valiosa lección de salud pública en su reciente intervención en el pódcast 'Animales Humanos', presentado por Ibai Vegan. Durante la conversación, la enfermera abordó temas de gran interés sobre la salud actual, centrando especialmente su atención en los mitos que rodean a la gripe y en una duda recurrente en muchos hogares: ¿ibuprofeno o paracetamol?

Uno de los mensajes más contundentes que quiso dejar claro Gómez fue la necesidad de diferenciar entre virus y bacterias para evitar el mal uso de medicamentos. “Lo que quiero que la gente se quede es que: si es virus, no se trata con antibiótico. Si es bacteria, sí se trata con antibiótico”, explicó, insistiendo en la importancia de acudir a los centros de salud para realizar pruebas diagnósticas gratuitas que permitan saber de qué tipo de infección se trata. Esta recomendación, según destacó, es clave para evitar el autodiagnóstico y la automedicación, prácticas que siguen siendo comunes pero que pueden tener consecuencias negativas para la salud.

Respecto a la medicación, Gómez explicó de manera didáctica las diferencias fundamentales entre el paracetamol y el ibuprofeno, dos fármacos habituales en los botiquines caseros. “El paracetamol es analgésico, es decir, nos quita el dolor; y es antipirético, es decir, que nos sirve para bajar la fiebre”, señaló.

Por otro lado, el ibuprofeno, además de ser analgésico, es también antiinflamatorio, de ahí que se clasifique como un AINE (antiinflamatorio no esteroideo). Como ejemplo práctico, señaló: “Si estoy jugando al fútbol, me doy un golpe y tengo inflamada la rodilla, mejor tomarme el ibuprofeno porque tengo una inflamación por un golpe y tengo dolor”.

Para los casos de gripe, Gómez fue clara: el fármaco más adecuado es el paracetamol, ya que ayuda a mitigar el dolor generalizado y la fiebre, síntomas comunes de esta enfermedad vírica. En ese sentido, también desmintió una serie de creencias erróneas en torno a la gripe, explicando por qué suele haber un pico de casos en invierno. “A los bichos que provocan la gripe no les gusta el calor, por eso los picos se producen en épocas frías”, comentó.

Además, destacó dos factores adicionales: la tendencia a permanecer en espacios cerrados y con poca ventilación durante los meses fríos, y una curiosidad fisiológica que muchos desconocen: los pelos de la nariz, que actúan como barrera protectora, se tensan con el frío, disminuyendo su efectividad. Como respuesta, el cuerpo activa el segundo mecanismo de defensa: el moqueo.