La (otra) sorpresa de las regatas: hoy compite la infanta Elena tras 11 años de ausencia

Trenza, gorra, ropa deportiva, gafas para el sol y calzado cómodo. Es fácil aventurar el look de la infanta Elena para embarcarse en el Titia, con cuya tripulación navegará a partir de hoy para pelear por el título en 6 Metros clásicos. La clase en la que también iba a participar el rey Juan Carlos comenzó el martes en la Copa del Rey de Vela con un dominio rotundo del Bribón, que parece no echar de menos (deportivamente hablando) a Su Majestad. El laureado regatista gallego Pedro Campos le sustituye como patrón con bastante fortuna.

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La presencia de la infanta Elena en la competición ha sido toda una sorpresa. Nadie imaginaba que la hermana del rey Felipe estuviera pensando en volver a las regatas, teniendo en cuenta que no participaba desde el año 2007. La hija de don Juan Carlos anunció que se sumaba al equipo del Titia el mismo día que su padre anunciaba su retirada por motivos de salud. La armadora del velero es Alicia Freire y el patrón, Mauricio Sánchez-Bella, ambos muy amigos tanto de don Juan Carlos como de su hija Elena.

El matrimonio forma parte de esa nueva 'corte de amigos gallegos' con los que el rey Juan Carlos ha podido volver a navegar. En un artículo publicado por la revista 'Vanity Fair', Sánchez-Bella habló de cómo el regreso del Rey emérito a las regatas le había rejuvenecido: “Se sienta al mando del timón y no se mueve. Desde que ha vuelto a la vela ha rejuvenecido. Ha estado muy enfermo y llevaba casi ocho años sin competir. Creía que no podría volver a navegar, pero aquí está, ejerciendo de patrón”.

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Parece que la infanta Elena hubiera recogido el testigo de esta pasión ahora frustrada de su padre. La Infanta ha salido a entrenar en alta mar estos días durante varias horas "para familiarizarse con el barco y la tripulación, puesto que en los últimos años apenas ha practicado el deporte de la vela", según señala el 'Diario de Mallorca'.

No ha faltado un día al Club Náutico

Lo cierto es que, desde que empezaran los entrenamientos el pasado fin de semana, doña Elena no ha faltado un día al Club Náutico. Ya sea para entrenar o para apoyar de forma entusiasta a su hermano el Rey, que compite en otra categoría. Ayer se embarcó junto a su hija Victoria en el Mapfre, que acaba de terminar su participación en la Volvo Ocean Race (o lo que es lo mismo, de dar la vuelta al mundo) y se encuentra de exhibición en Palma. Después cogió la lancha Somni y siguió disfrutando de la competición.

El de las regatas no es el único regreso que ha protagonizado doña Elena este año. En primavera, la hija de Juan Carlos I volvió a representar a la Casa del Rey de manera oficial en varios actos. Hay que recordar que, además, lo hace por amor al arte (o a España, como a ella le gusta remarcar).

Sin retribución por representar al Rey

Tras la proclamación del Rey en junio de 2014, Felipe VI consideró conveniente regular las actividades de los parientes reales que tantos problemas le han dado hasta ahora. Entonces, se estipuló que cuando un miembro de la familia del Rey (queda excluido el núcleo, la familia real) desarrolle actividades de representación de la casa por encargo del Rey "no percibirá retribución por el desempeño del encargo o actividad que le haya sido encomendada". Si bien doña Elena sí cuenta con apoyo personal y material.

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Veremos si con el nuevo curso doña Elena asume más encargos de Felipe VI para representarle, habida cuenta de que la salud del monarca emérito parece desaconsejarle de momento estar presente en la agenda real. A la espera de ver si eso sucede, la primogénita de don Juan Carlos saldrá hoy a la mar a revivir la emoción de competir en unas regatas. Unas imágenes que transportarán a veranos más plácidos para la familia real.