La familia de Ernesto de Hannover le asesta la estocada definitiva
En un año en el que los escándalos del príncipe alemán han sido más que sonados, sus hijos tienen clara su postura y han dejado patentes quiénes son sus apoyos en la guerra familiar
Navidad, tiempo de paz, de amor, de estar en familia. Menos para aquellos que protagonizan un conflicto familiar alargado en el tiempo y sin pinta de solucionarse pronto. Es el caso de Ernesto de Hannover, que ha recibido quizá el mensaje más inesperado de parte de su hijo mayor, con el que la relación es bastante tensa desde hace unos años. Un mensaje que ha llegado en forma de postal navideña -que no iba dirigida directamente a él, obviamente- y en el que deja clara su posición y quiénes son los miembros de su familia que siempre están a su lado, asestándole la estocada definitiva en un año en el que los escándalos protagonizados por el príncipe alemán han sido más que sonados.
La postal nos ha llegado a través de las redes sociales de una seguidora de la realeza europea. Por primera vez, la felicitación navideña que cada año suele mandar a diferentes royals, incluido Ernesto de Hannover jr., ha tenido su respuesta. En su carta, en la que desean a esta chica una feliz Navidad y lo mejor para el nuevo año, vemos dos fotografías. Una del heredero de la casa Hannover con su mujer, Ekaterina, sus dos hijos y sus dos mascotas. Otra, mucho menos habitual y significativa, en la que les acompaña la madre de él, Chantal Hochuli. Una presencia más que destacada, puesto que prácticamente vive retirada de las cámaras, dejándose ver por última vez en la boda de su hijo Christian, en la que precisamente coincidía con Ernesto de Hannover, en la que sería su última reunión familiar.
Queda claro con esta fotografía la distancia que hay actualmente entre padre e hijo y el férreo apoyo que Ernesto jr. tiene en su madre para preservar el título y los bienes correspondientes a la casa de Hannover. Chantal Hochuli nunca se había manifestado abiertamente sobre el grave conflicto familiar, pero con esta imagen deja patente cuál es su posición. Una postura que comparte con Carolina de Mónaco, quien incluso está evitando a toda costa divorciarse del príncipe alemán para que los dos hijos mayores de su todavía marido puedan mantener la herencia que les corresponde, a pesar de la oposición frontal que todos se están encontrando en el propio Ernesto de Hannover, cada vez más polémico y con un estado de salud mental nada equilibrado.
Igual de significativo es el nombre con el que los cuatro miembros de la familia firman la postal. Leemos los nombres de pila de todos -Chantal no está incluida-, tanto de Ernesto como de Ekaterina y sus dos hijos. Y vemos también el nombre de su hijo pequeño, Welf August, quien debería ser el heredero legítimo de la casa en un futuro. Un nombre que también refleja a la perfección el conflicto familiar, ya que las desavenencias de su padre y su abuelo y el hecho de que el príncipe alemán no quiera reconocer a su primogénito como heredero, hizo que Ernesto jr. tuviera que romper con todas las tradiciones familiares y, después de varios siglos, suprimir el Ernesto del nombre de su hijo.
Navidad, tiempo de paz, de amor, de estar en familia. Menos para aquellos que protagonizan un conflicto familiar alargado en el tiempo y sin pinta de solucionarse pronto. Es el caso de Ernesto de Hannover, que ha recibido quizá el mensaje más inesperado de parte de su hijo mayor, con el que la relación es bastante tensa desde hace unos años. Un mensaje que ha llegado en forma de postal navideña -que no iba dirigida directamente a él, obviamente- y en el que deja clara su posición y quiénes son los miembros de su familia que siempre están a su lado, asestándole la estocada definitiva en un año en el que los escándalos protagonizados por el príncipe alemán han sido más que sonados.