De la seriedad de Alexia al cambio radical de Amalia: el posado de Máxima y sus hijas

Comienzan las vacaciones para la familia real holandesa. Y eso es sinónimo de posado en los jardines de Huis ten Bosch. Guillermo, Máxima, Amalia, Alexia y Ariane han protagonizado la sesión de fotos anual que marca el final de la temporada laboral para los reyes, aunque este verano no va a ser así del todo, puesto que el monarca tiene compromisos en unos días. Y como es habitual, ni Máxima ni sus tres hijas han defraudado con sus estilismos, sus poses y sus sonrisas; o, al menos, las de casi todas ellas, porque hemos visto a una de las hijas de los reyes bastante más seria de lo normal.

El posado ha empezado a las diez en punto en los jardines de su palacio, Huis ten Bosch, donde hay sitio suficiente para que fotógrafos, cámaras y redactores no se pierdan ni un detalle de los protagonistas. Como en años anteriores, nos han regalado fotos de todo tipo: en grupo, de Guillermo y Máxima solos, de sus hijas solas... Lo habitual en este tipo de citas, tan esperadas por los medios de los Países Bajos. Tanto que el respetar su esfera privada es una de las condiciones que imponen los reyes para que los periodistas estén acreditados a este posado familiar, a través del código de conducta que se 'sugiere' a los medios de comunicación del país.

Pero es cierto que el posado de este viernes ha sido un tanto agridulce, ya que las malas noticias han copado esta semana los titulares del país. Primero, por el fallecimiento de Peter R. Vries, un conocido periodista de investigación que fallecía hace unos días tras ser víctima a principios de mes de un tiroteo, cuando salía de su trabajo en una emisora de radio en Ámsterdam. Después, por las inundaciones que sufre parte del país y por las que han muerto varias personas y decenas han perdido todo lo que tenían. Precisamente, Guillermo y Máxima visitaban la zona afectada la tarde anterior a este posado, por lo que sus declaraciones ante los medios no han sido tan alegres como suelen ser otros años.

Y, claro, uno de los detalles más esperados de este posado familiar es el look de Máxima y sus hijas, que han optado por todo lo contrario que el año pasado, cuando aparecieron todos a juego, de blanco y azul. Para la sesión de fotos de este año, cada uno ha elegido un estilo y un color diferente. La más veraniega, la reina, con un vestido largo en tonos naranjas y blancos y estampado tropical de Zimmerman. Su hija pequeña, Ariane, también ha elegido un vestido en tonos azules y rojos, con unas sandalias de tacón, a las que se ha aficionado en sus últimas apariciones públicas, siguiendo la estela de sus hermanas, ya unas expertas con los tacones.

Pero son Amalia y Alexia las que más han llamado la atención en este posado familiar. La heredera ha optado por un look completamente diferente al que mostró el año pasado, lo que puede obedecer a los innumerables comentarios que hubo sobre su aspecto físico, que incluso llegó a ser objeto de una ofensiva portada en una revista argentina. Así que este año ha elegido algo radicalmente distinto a aquel vestido camisero azul: pantalón oscuro ajustado y americana roja con cinturón a rayas de Tommy Hilfiger. Un look working que ha completado con unas sandalias negras con tachuelas doradas, de Guess.

Más allá del look de Alexia -pantalón verde de Zara y camisa blanca de manga abullonada-, han llamado la atención las escasas sonrisas dirigidas a cámara y la poca entrega que ha tenido con el posado, en el que otros años se convertía en la auténtica protagonista con sus miradas a cámara y sus poses. Una actitud que muchos no han tardado en relacionar con su futuro. Y es que, cuando terminen las vacaciones, Alexia viajará a Gales para estudiar en el UWC Atlantic College con la princesa Leonor, lo que, al parecer, no la tiene demasiado contenta.