Una reina "nada distante" y un gran proyecto: las entrenadoras de waterpolo nos cuentan la visita de Letizia

Sábado 21 de enero de 2023. Madrid, Real Canoe Natación Club. 17:00 horas de la tarde. Todo está listo para el partido de waterpolo que va a enfrentar al equipo femenino homónimo contra el Leioa, de Bilbao. Es en esos minutos previos cuando los allí presentes se enteran de la noticia: la Reina de España se ecuentra en el lugar y va a disfrutar de la competición deportiva. Los nervios afloran. Es el presidente del club, Ricardo Camacho, quien recibe a las puertas del edificio a doña Letizia, que deja muy claro desde el primer momento que quiere ser tratada como una más.

No está allí como Reina, sino como ciudadana privada para disfrutar del partido. Viste un jersey fucsia, unos pantalones pitillo de Levi's y unos botines. Ha llegado sola, únicamente acompañada por dos miembros de seguridad, que se mantienen a distancia, discretos. Doña Letizia ocupa la grada, sentada al lado del presidente del club y de su esposa, y durante las cuatro partes, de 7 minutos cada una, vibra con los pases que finalmente dan la victoria al Real Canoe Natación Club con 18 puntos frente a los 6 del Leioa.

Es una vez finalizado el partido cuando empieza la locura. Todos los presentes son conscientes de la presencia de la Reina, y no dudan en acercarse a ella para saludarla, entre ellas Carolina Beneyto Vizuete y Astrid Álvarez Cora, entrenadoras del equipo de las ganadoras y expacientes oncológicas. Mientras doña Letizia se fotografía con las jugadoras, que aprovechan para hacerse un BeReal con Su Majestad, a lo que ella acepta sin problema, estas dos mujeres cuentan a la Reina un gran proyecto que tienen en mente y que está muy relacionado con su trabajo: la asociación Múevete Frente al Cáncer.

Con Karol y Astrid hemos hablado desde Vanitatis para tener más detalles acerca de esta visita real: "No sabíamos que la Reina venía, nos informaron en el último momento. No sabemos muy bien cómo se gestionó, pero fue una visita privada, como si hubiera ido al cine. Quería ser una más. Ella no conocía nuestra fundación, y después del partido se lo expusimos y se interesó. Nos aseguró que nos seguiría y que lo iba a mirar. Le contamos qué somos, lo que hacemos... Esperamos que en su cita de este miércoles con la AECC haya hablado de ello", cuentan al otro lado del teléfono.

"Nosotras lo que queremos es dar importancia al deporte durante y después de la enfermedad. Es necesario hacer ejercicio y visibilizar la importancia de la investigación. Nuestra intención es poder resolver dudas cuando te dicen que tienes cáncer, como: ¿puedo hacer deporte?, ¿me puedo bañar? Creemos que puede ser bueno contar nuestra experiencia, que ha sido bastante positiva; la mentalidad suma mucho en una enfermedad así. La idea es crear un centro multidisciplinar para que los pacientes oncológicos puedan encontrar respuestas, durante el cáncer y también después", continúan.

Ya desde su llegada, doña Letizia quiso mostrarse como una más, de ahí que cuando se le preguntó si quería acceder a las piscinas por la cafetería o por un sitio más discreto, "ella dijo que como una persona normal, por la cafetería, y fue saludando a todos. Saludó a todo el mundo, supersimpática. Nos impactó". explican. "Yo tenía la imagen de una Reina más distante, pero no. Incluso la agarré de la cintura cuando nos hicimos la foto. Fue ella la que dijo cómo ponernos y le dejó el bolso a la mujer del presidente. Fue todo muy surrealista. Mi hija me decía: "No parece la Reina" por lo cariñosa y empática que se mostró en todo momento", confiesa Karol.