La doble subasta de Lady Di: un icónico jersey y una reveladora carta sobre su divorcio

Pese a que han transcurrido ya más de 25 años desde su trágica y prematura muerte, todo lo que rodea a la princesa Diana sigue siendo fuente de un gran interés, sobre todo cuando se trata de objetos que fueron muy especiales para ella o algunos que nunca habían salido a la luz hasta el momento. Si hace unos meses salían a subasta unas picaronas tarjetas de felicitación que mostraban el lado más gamberro de la royal y que envió al hermano de la reina Sofía, en breve los más mitómanos podrán optar a poseer dos icónicos tesoros más.

El primero de ellos es una carta recién descubierta que ha puesto de manifiesto la "inquietud" de Lady Di por su nueva vida de soltera y que escribió poco antes de divorciarse del ahora rey Carlos III.

La reveladora misiva, escrita al presidente de la Fundación Real Neozelandesa para Ciegos, será subastada el próximo mes por Julien's Auctions y Turner Classic Movies en Beverly Hills (California). Según ha publicado 'The Telegraph', Diana alegó "circunstancias personales, en particular mi matrimonio con el príncipe de Gales", para renunciar a su cargo en esta organización benéfica, de la que era patrona.

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La madre de dos hijos explicó en su escrito que no podía ofrecer el nivel de compromiso que requería el cargo, ya que debía "reorganizar" su vida. La fallecida princesa añadió en la carta que, aunque seguía teniendo esperanzas, todavía tenía que resolver "una serie de asuntos", mientras explicaba que escribía "con gran tristeza" para renunciar a su puesto.

"Como sabes, mis circunstancias personales, en particular mi matrimonio con el príncipe de Gales, han sido objeto de conjeturas detalladas en los últimos meses y pronto se formalizarán de la manera legal habitual", escribe de forma muy franca. "Aunque me embarco en el futuro con esperanza, también lo hago con cierto temor, ya que hay una serie de asuntos que tendré que resolver".

"Como intento reorganizar mi vida, no me será posible ofrecerte el nivel adecuado de compromiso y creo que puede haber alguien más adecuado para apoyarte en todo lo que haces", finaliza la carta, que está fechada el 15 de julio de 1996, un mes antes de la separación oficial de Carlos y Diana.

Este curioso testimonio de un momento complicado en la vida de Lady Di se une a otra pieza icónica de su armario que también irá a parar al mejor postor. Se trata de su famoso jersey rojo de ovejas blancas, que será subastado por Sotheby's Nueva York entre el 31 de agosto y el 14 de septiembre de este año.

El jersey formará parte de la subasta inaugural de Iconos de la Moda y se espera que alcance entre 50.000 y 80.000 dólares. Junto al jersey se incluirán dos cartas en las que se detallan los sentimientos de Lady Di sobre la prenda. En una de ellas lo calificaba de "tejido muy querido" y en la segunda, una nota de agradecimiento, expresaba su gratitud por su nuevo jersey.

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Maite Torrente

La princesa fue vista por primera vez con el jersey rojo y blanco cuando tenía 19 años en uno de los partidos de polo del rey Carlos, justo un mes antes de su boda. Los diseñadores del jersey, Sally Muir y Joanna Osborne, de la firma Warm & Wonderful, solo supieron que Diana era propietaria de uno de sus productos después de que circularan fotos de ella vistiéndolo en el 'Sunday Times'. El poder de la prensa catapultó a la entonces pequeña empresa a una popularidad estratosférica.

El grado de fama de esta emblemática prenda se puede comparar quizá al del famosísimo 'vestido de la venganza' de Diana, que también salió hace años a subasta. La madre de Harry y Guillermo lo llevó para una gala en la Serpentine Gallery la misma noche de 1994 en la que el príncipe Carlos confesó en la televisión nacional que le había sido infiel.

Aunque se había filtrado que Diana iba a asistir al evento vestida de Valentino, eligió finalmente este diseño de la griega Christina Stambolian que llevaba tres años en su armario. En el verano de 1997, poco antes de su muerte, Diana subastó 79 de sus vestidos en la casa Christie's de Nueva York. Los beneficios se repartieron entre varias organizaciones benéficas.

Este vestido en cuestión, que originalmente había costado a la princesa 900 libras, se vendió por 39.098 libras, más de 85.000 a precios actuales. Fue comprado por Graeme y Briege Mackenzie, una pareja escocesa que en aquel momento reveló que lo utilizaría para seguir recaudando fondos para organizaciones benéficas.