De Carolina de Mónaco y la princesa Charlène a Brigitte Macron: los looks de la cena de gala en la visita de Estado
El político puso rumbo, este sábado, junto a su esposa, a Mónaco. Se trata de la primera visita de un presidente de la república francesa en más de cuatro décadas
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fbb3%2F05e%2F033%2Fbb305e033f9e25bc26bf90bd2240ac8e.jpg)
Su visita a Mónaco había creado una gran expectación. Más aún porque desde hace cuatro décadas ningún presidente de la república francesa había visitado el Principado. Hasta este sábado. Emmanuel Macron y su esposa, Brigitte, llegaron pasadas las cuatro de la tarde y protagonizaron su primer posado junto al príncipe Alberto y la princesa Charlène. También estaban los dos hijos gemelos de los monegascos. Ambas destacaron por su elegancia y volvieron a hacerlo en la cena de gala que tuvo lugar unas horas después.
Para la ocasión, Brigitte Macron optó por un impecable vestido blanco de línea recta que acompañó de una capa fluida que, con su caída, daba un aire de majestuosidad. El conjunto, de inspiración arquitectónica, realzaba su silueta y daba un toque de pureza y modernidad. Como en su llegada a Mónaco, la primera dama francesa apostó por la joyería discreta para que el protagonismo se lo llevase el vestido. También abogó por un peinado suelto y maquillaje natural.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F9c2%2Fcea%2Fe64%2F9c2ceae64e6e787af69945a121843c51.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F9c2%2Fcea%2Fe64%2F9c2ceae64e6e787af69945a121843c51.jpg)
Charlène de Mónaco brilló con un vestido rojo intenso, sin mangas y de silueta minimalista. La elección de color, vibrante y con fuerza, contrastaba con la delicadeza de la tela que discurría, con suavidad, en la falda. La esposa del príncipe Alberto portó unos pendientes largos y brillantes, una especie de peinado recogido con mechones y un maquillaje de acabado impecable que dotaron el look de simbolismo proyectando una imagen de poder y elegancia.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F3c3%2F822%2F4a4%2F3c38224a4de6c120f824ab62864e83e4.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F3c3%2F822%2F4a4%2F3c38224a4de6c120f824ab62864e83e4.jpg)
Aunque no estuvo en la recepción, sí hizo acto de presencia Carolina de Mónaco. La hija de Grace Kelly acudió a la cena con un conjunto de texturas ricas y detalles meticulosos. Su chaqueta brocada en tonos plata y perla, adornada con una gorguera de tul rosa empolvado, hacía recordar a otras épocas, marcadas por la opulencia. Eso sí, sin renunciar a la estética moderna. Acompañó el look con broches de diamantes y pendientes de gran tamaño que mostraban, una vez más, que la elegancia reside en los pequeños detalles.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fed9%2F993%2F833%2Fed9993833a3e339ac0ec50d7fdfde9f5.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fed9%2F993%2F833%2Fed9993833a3e339ac0ec50d7fdfde9f5.jpg)
Por su parte, Alberto de Mónaco apareció con su tradicional esmoquin negro, proyectando una imagen de dignidad y solemnidad a la altura del evento. Un look similar al de Emmanuel Macron, que optó por un esmoquin negro con solapas satinadas y pajarita, clásico y bien cortado. Así, a través de las distintas instantáneas que se han publicado, se puede ver que la velada fue viento en popa y que sirvió para fortalecer el vínculo entre ellos, algo que ayudará a llegar a acuerdos en distintos ámbitos.
Su visita a Mónaco había creado una gran expectación. Más aún porque desde hace cuatro décadas ningún presidente de la república francesa había visitado el Principado. Hasta este sábado. Emmanuel Macron y su esposa, Brigitte, llegaron pasadas las cuatro de la tarde y protagonizaron su primer posado junto al príncipe Alberto y la princesa Charlène. También estaban los dos hijos gemelos de los monegascos. Ambas destacaron por su elegancia y volvieron a hacerlo en la cena de gala que tuvo lugar unas horas después.