Shakira acude a los juzgados con un total pink look, con top de canalé y bolso a conjunto de una firma francesa

Tras la resaca de emociones y felicidad de los Latin Grammy, donde se alzó con varias estatuillas y fue una de las artistas más premiadas de la noche, este lunes no pintaba tan glamuroso para la colombiana. Tal y como adelantamos en estas páginas, hoy, 20 de noviembre, comenzaba el juicio en la Audiencia de Barcelona donde sus abogados tenían que demostrar que la cantante no vivió en España de 2012 a 2014. Acusada de seis delitos contra la Hacienda pública por no declarar ni el IRPF ni el impuesto de patrimonio durante esos años, la Fiscalía había solicitado para ella 8 años de cárcel y 14,5 millones de euros.

No obstante, el juicio no llegará a producirse. El equipo de la defensa de la cantante, liderado por Pablo Molins, ha emitido un comunicado apenas unos minutos después de la llegada de Shakira a la sede judicial donde se asegura que finalmente han llegado a un acuerdo. Aunque era un rumor que cada minuto sonaba más fuerte, Shakira tenía que comparecer igual en la audiencia.

Puntual y elegante, la colombiana, siguiendo la estela estilística de su última aparición en este escenario, se ha decantado por un look sobrio y muy diferente a los que ha lucido durante, sin ir más lejos, la alfombra roja y la gala de los premios más importantes de la música latina del pasado jueves. Ha desfilado ante los más de 200 periodistas acreditados con un traje de chaqueta color rosa claro, que combinó con unas gafas de sol con montura a juego XXL y bolso de Jacquemus a tono en ese mismo color pálido. Una combinación mucho más suave y sencilla de la que luce en conciertos y promociones de su música.

180 testigos que no testificarán

El juicio debería haberse producido a lo largo de 12 de sesiones. Largas jornadas que estaba previsto que contaran con el testimonio de 119 testigos reclutados por la acusación cuyo objetivo era demostrar que la que fuera pareja de Piqué residía en España. Peluqueros, esteticistas, profesores de yoga, vecinos y personas cercanas estaban dispuestos a prestar declaración para apuntalar la línea del Ministerio Fiscal.

También la defensa se había preparado a conciencia y pensaban presentar batalla con otras 60 personas por parte de la defensa de la cantante, liderada por Pablo Molins, quien fuera uno de los abogados defensores de la infanta Cristina. No obstante, finalmente, como decíamos, han presentado un acuerdo en el que admite el fraude fiscal para evitar una posible pena de cárcel.

Un acuerdo 'in extremis' que suspendía su declaración pocos minutos antes de la hora a la que estaba citada y que evitaba que se sentara en el baquillo. "Tengo que escoger mis batallas y la más importante para mí ahora es hacer todo para que mis hijos vivan una vida plena y enfocarme en lo que es realmente importante: verlos crecer y pasar tiempo con ellos, sin someterlos a la angustia de ver a su madre en un juicio penal con el desgaste que supone. Ellos mismos me lo han pedido, y por ellos he tomado esta decisión. Han vivido tiempos muy duros y quiero que me vean feliz por fin y mirar juntos hacia el porvenir”.

A partir de ahora, Shakira continuará viviendo con ellos en Miami, desde donde pretende "dejar atrás este capítulo".