Las claves de la herencia de Shannen Doherty: su fortuna y el papel de su exmarido

Este sábado el mundo de la actuación recibía una trágica noticia: la actriz que dio vida a Brenda Walsh en ‘Sensación de vivir’ fallecía a los 53 años debido a un cáncer de mama. Según un artículo de CNN, Shannon fue diagnosticada en 2015, después de que saliera a la luz que había demandado a su exadministradora por no pagarle el seguro médico que le correspondía. Tal y como indica el informe, “si Doherty hubiera tenido cobertura médica en el momento, el cáncer se hubiera podido detectar antes, y no habría tenido que afrontar tratamientos como quimioterapia y una mastectomía”.

A finales de 2023, Doherty creó un podcast, ‘Let’s be clear’, en el que, entre otras cosas, entrevistaba a sus excompañeros de ‘Sensación de vivir’ y ‘Embrujadas’ y compartía con sus seguidores cómo era el día a día de su enfermedad.

Según el medio ‘Radaronline’, Shannen también habría confesado su patrimonio. En una declaración sobre ingresos y gastos presentada en junio, la actriz habría declarado que poseía unos tres millones de dólares en inmuebles, explicando que aún tenía que pagar otros tres de la hipoteca de su casa en Malibú, valorada en unos seis millones. Además, tendría 251.000 dólares en el banco, cobraría una pensión de 134.000 dólares y poseería 1.880.000 dólares invertidos en acciones y bonos.

Asimismo, en dichos documentos, la propia Shannon habría afirmado que su exmarido estaba esperando que ella sucumbiera al cáncer para evitar pagarle lo que le deBía. La pareja, que se casó tres años después de conocerse en 2011, se separó en 2023, y desde entonces la actriz ha estado luchando en los tribunales para conseguir una pensión alimenticia. “Durante nuestro matrimonio, especialmente en los últimos años de nuestra relación, Kurt ganó siete millones de dólares por año. Se hizo un nombre en la industria. La media anual de las ganancias de Kurt durante los tres últimos años de matrimonio era de 672.916 dólares. Mi media anual de ganancias durante los tres últimos años de matrimonio fue de 259.708 dólares”, habría contado Shannen.

Al parecer, debido a su enfermedad, la actriz no había podido trabajar desde entonces y acarreaba “pagos médicos desorbitados” que no estaban cubiertos por su seguro de salud. Tal y como cuenta la revista ‘People’, Shannen consiguió firmar los papeles del divorcio con el fotógrafo Kurt Iswarienko, un día antes de fallecer. La separación consiguió realizarse mediante un acuerdo amistoso. En unos documentos a los que accedió el propio medio se podía leer: “Las partes han firmado un acuerdo por escrito sobre su propiedad y sus derechos matrimoniales o de pareja de hecho; incluyendo la manutención”. Kurt habría firmado la documentación el mismo día de la muerte, el 13 de julio.