Conseguir una mandíbula perfecta, el objetivo estético estrella de 2020
Ovalado como el de Scarlett Johansson. O definido y anguloso como el de Angelina Jolie. Así se consiguen (con pinchazos o a golpe de bisturí) los mentones más deseados
Después de la fiebre por los pómulos y los labios, la mandíbula se alza este año como la nueva zona deseada para la medicina y cirugía estéticas. Es curioso cómo esta parte del rostro, que se solía relacionar con procedimientos para pacientes masculinos, está levantando pasiones también entre ellas. ¿Por qué? “Una mandíbula definida es sinónimo de juventud y clave para definir el conocido como triángulo de belleza (ojos, pómulos, barbilla)”, sostiene el doctor Artur Díaz Carandell, cirujano plástico y maxilofacial del Instituto de Benito (Barcelona). De hecho, las cirugías de mentón –o mentoplastias- han aumentado un 17% en los dos últimos años, según la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial de Cabeza y Cuello. Otra pista: busca en Instagram el hashtag #jawline y verás que suma más de 700.000 publicaciones…
La realidad es que las intervenciones en esta zona tienen un efecto inmediato en la armonía facial, ya que implican acabar con signos tan poco atractivos como la papada, el descolgamiento o –al margen de edad y peso- una barbilla retraída. Para Díaz Carandell, los ejemplos más demandados serían la mandíbula cuadrada y perfectamente dibujada de Angelina Jolie (“Tan ancha como la frente y con un corte angular muy definido", detalla) y las ovaladas y en forma de corazón de Scarlett Johansson y Charlize Theron.
Así es la paciente tipo
Parece evidente que cuando hablamos de retocar la mandíbula, estamos ante una paciente que ya ha cumplido los 50 y cuenta con pérdida del óvalo facial. “Con la edad, se produce un descolgamiento de los tejidos –provocado por la pérdida de estrógenos-, que se traduce en flacidez y atrofia de la grasa de la cara, relacionados ambos con una mandíbula desdibujada”, aclaran las doctoras Virtudes Ruiz y María Vicente (Clínica Virtudestetica, Murcia).
Pero, junto a esta tipología clásica, el doctor Jesús Olivas-Menayo, cirujano plástico de Clínica FEMM (Madrid), reconoce otras tres que no están tan relacionadas con el paso del tiempo: “Caras muy redondeadas que quieran recuperar o redibujar su óvalo facial; falta de definición en la zona que separa la cara del cuello y acúmulo de grasa en la papada”.
Además, como señala Díaz Carandell, están las pacientes que "cuentan con una alteración de la mandíbula por exceso (un mentón grande que tenemos que retraer) o por defecto o hipoplasia, es decir, que le falta proyección y se la damos”.
Empezar por el pinchazo…
El doctor Olivas-Menayo empieza hablando de las opciones de medicina estética, menos invasivas, que permiten prevenir y de recuperación más sencilla. Para aumentar el volumen o angulación de la mandíbula, y especialmente del mentón, recomienda sustancias de relleno con infiltraciones de ácido hialurónico o hidroxiapatita cálcica (ambas, de 450 €). Otra opción es tratar la flacidez con radiofrecuencia, “lo que permite retensar toda la piel y grasa a lo largo de la mandíbula para que recupere la forma curvilínea propia de la juventud”.
El doctor apuesta por dispositivos como BodyTite (desde 3.500 €), que requiere una incisión para que la aplicación sea subdérmica mediante cánula, o Morpheus 8 (desde 590 €), con un aplicador con microagujas que va introduciendo las ondas de calor en el tejido.
Por su parte, en Virtudestética, las doctoras cuentan con el protocolo Restructure Active (a partir de 600 €). En él se combina la infiltración de hidroxiapatita cálcica, junto con ácido hialurónico específico para esta zona, toxina botulínica, y en los casos con un mayor descolgamiento y desdibujado de la mandíbula, también suturas con conos. El tratamiento se completa con nutricosmética, a base de suplementos antioxidantes con sustancias como astaxantina, glicina, selenio, cúrcuma, zinc, vitamina D3, licopeno o Q10, que resultan beneficiosas para la regeneración tisular.
…o terminar en el quirófano
Para remodelar definitivamente una mandíbula o mentón es necesario recurrir a la cirugía. El doctor Díaz Carandell, del IdB, propone la mentoplastia (aprox. 5.000 €). “Lo que más se pide hoy es adelantar el mentón si está retraído o retrasarlo si está proyectado hacia delante”. La técnica consiste en abordar el hueso desde dentro de la boca, debajo del labio, por lo que la cicatriz no se ve.
También destaca el afinamiento de los ángulos, para un contorno mandibular más ovalado (desde 5.000 €). Es la técnica preferida de las mujeres asiáticas y consiste en cortar con bisturí la parte más externa de estos ángulos. El resultado es que se afina toda la cara, ya que se perfila todo el contorno.
Después de la fiebre por los pómulos y los labios, la mandíbula se alza este año como la nueva zona deseada para la medicina y cirugía estéticas. Es curioso cómo esta parte del rostro, que se solía relacionar con procedimientos para pacientes masculinos, está levantando pasiones también entre ellas. ¿Por qué? “Una mandíbula definida es sinónimo de juventud y clave para definir el conocido como triángulo de belleza (ojos, pómulos, barbilla)”, sostiene el doctor Artur Díaz Carandell, cirujano plástico y maxilofacial del Instituto de Benito (Barcelona). De hecho, las cirugías de mentón –o mentoplastias- han aumentado un 17% en los dos últimos años, según la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial de Cabeza y Cuello. Otra pista: busca en Instagram el hashtag #jawline y verás que suma más de 700.000 publicaciones…
- Rinomodelación sin cirugía: cambiar de nariz sin dolor es posible Margarita Velasco
- Cómo deshacerse de las ojeras sin recurrir a la blefaroplastia, la alternativa a la cirugía en formato láser Margarita Velasco
- Cosméticos que actúan como tratamientos de medicina estética Cristina Martín Frutos