Flequillo 'cuello de botella' o bottleneck bang, el nuevo curtain fringe más retro y cómodo

Los flequillos han pasado de ser un estilismo arriesgado que viene y va entre las tendencias de cada año a convertirse en un corte de pelo oficial con variantes tanto o más elaboradas que los distintos tipos de bob. Distinguimos de los más finos como el curtain a los más cortos tipo choppy o baby bang, sin olvidar por supuesto a los más exitosos y fáciles de llevar, los flequillos retro. Es entre ellos donde encontramos el flequillo que promete sacudir las tendencias del año, 'cuello de botella' o 'bottleneck bang'.

De nuevo hablamos de un flequillo largo y que no toma demasiado cabello para poder camuflarse con el resto de cabello o aparecer y tomar protagonismo. Su secreto es su escalado, cincelado para amoldarse a los rasgos de cada rostro y degradado para que no exista un corte entre melena y flequillo. ¿Se parece entonces al flequillo de Matilda Djerf? No, mientras el corte de la sueca parte de un flequillo Bardot, muy fino, que se degrada hasta perderse con el resto de capas como ocurriera con el corte Julia Roberts, para lograr un volumen esponjoso sin líneas rectas. El flequillo 'cuello de botella' comienza su degradado desde una parte muy alta para abrirse como una cortina.

En qué consiste el bottleneck bang

Su nombre se lo da precisamente el diminuto corte en los mechones frontales del flequillo y se lo ponía el peluquero británico Tom Smith. El efecto cuello de botella, en inglés 'bottleneck', responde al perfil que el cabello recorta en el rostro. La parte alta de la botella -donde encontramos el tapón- serían los mechones centrales, tan cortos casi como el baby bang de Audrey Hepburn en ‘Vacaciones en Roma’, seguidos de los mechones más largos del flequillo, similares al flequillo cortina y que no cubren los ojos sino que ayudan a abrir aún más la mirada. La zona en la que la botella se hace más ancha serían las mejillas, desde donde el flequillo se haría más largo y perdería con el resto de la melena al no ser tan evidentes sus capas.

De este modo, el flequillo se amolda a cada rostro. Los mechones más cortos permiten despejar la mirada y no tener que estar abriéndolo para poder ver, mientras que los mechones a la altura de las mejillas hacen las veces de contouring, realzan el pómulo logrando que se vea más prominente. La longitud del flequillo es uno de los ingredientes para ese sabor setentero que las tendencias del 2022 marcan. Al acompañar a melenas largas, se logra dar forma al rostro y evitar así la sensación de languidez y rostro alargado.

En palabras del estilista británico, si se quiere recrear el flequillo bottleneck, tan solo hay que pedir un flequillo largo que roce los pómulos en un ángulo que favorezca a los rasgos y las curvas de cada persona para crear una capa entre los pómulos y la mandíbula. "A continuación, pide a tu peluquero que repase la parte central para que quede un poco más corta, siempre manteniendo un corte suave y entrecortado", como explica el estilista, esta zona central más corta irá alargándose gradualmente hacia ambos lados para crear ese degradado tan característico.

"La forma del flequillo es más estrecha en la parte superior y luego se ensancha, como los hombros de una botella, a continuación se curva y se crea ese detalle debajo del pómulo. Es muy favorecedor. Es muy de los años 70, pero también es muy ahora", apunta en su cuenta de Instagram.

El origen de un flequillo

El lookazo de Margot Robbie en los premios Oscar en 2021 puso a todo el mundo de acuerdo en el acierto de corte de pelo. A su flequillo recto se le sumaba un tejido de mechas de contraste, un peinado ondulado efecto agua salada y una coleta baja con extensiones para conseguir un mayor volumen. El estilismo era perfecto, pero tras semejante éxito, la estrella australiana se veía forzada a mantener el nivel beauty en sus siguientes apariciones. La solución vino de la mano de su estilista de referencia, Bryce Scarlett que creaba un nuevo flequillo, muy setentero pero hecho a medida para las facciones de su rostro.

Con este nuevo flequillo, Margot protagonizaba la portada de la edición británica de 'Vogue' y su corte de pelo volvía a convertirse en uno de los más demandados. Por entonces, el peluquero no tenía nombre para el flequillo, ahora gracias a Tom Smith, el nombre es flequillo 'cuello de botella' o 'bottleneck bang'.