Los mejores acondicionadores para cabello graso

No estás sola en el hándicap de tener una melena con un extra de grasa. Caroline Greyl, presidenta de la firma capilar Leonor Greyl, identifica que las culpables son las glándulas sebáceas que, aunque se encuentran repartidas por todo el cuerpo, gozan de una mayor concentración en el rostro y, cómo no, en el cuero cabelludo. “Su principal función es proteger a la piel de la pérdida de humedad y mantener alejados a los microbios dañinos… Pero, a veces, estas glándulas sebáceas se disparan y las razones pueden ser diversas”, aclara la experta.

Entre los motivos por los que se enloquecen podemos encontrar cambios hormonales (más frecuentes en la adolescencia pero presentes a lo largo de la vida adulta), malos hábitos en la alimentación (es importante mantener una dieta equilibrada, con la cantidad adecuada de grasas, minerales y vitaminas), una limpieza errónea (con un lavado excesivo que aumente la producción de sebo, fórmulas agresivas que irriten la piel u obstruyan los folículos o referencias ineficaces)… O no utilizar nunca un acondicionador o mascarilla.

Es un problema frecuente ya que las personas con cabello graso suelen prescindir de este tipo de referencias sin tener en cuenta los beneficios que aportan a su pelo. En cabelleras desequilibradas hay que aprovechar la hidratación y la protección de los acondicionadores y mascarillas, pero la clave es seleccionar el más adecuado para ti y tus circunstancias.

La necesidad de sentir el pelo purificado

Si padeces este dilema 'beauty' seguro que entiendes la frase. Este tipo de melenas buscan la sensación de sentirse limpias y ligeras (sin las cutículas apelmazadas), más allá de la estética. Susana Collar, gerente de Cohem Peluquerías, nos recuerda que también hay que tener en cuenta la variedad de raíz grasa con medios o puntas secos… Esto supone “la necesidad no solo de regular esa grasa antiestética en raíz, sino de combatir la falta de nutrición del resto del cabello”.

¿Cómo elegir el acondicionador para los más grasos?

La experta tiene claro que importa tanto el formato como su formulación. Así, recomienda optar por ligeras que no apelmacen y que permitan realizar un aclarado total con la misión de que no queden residuos (siliconas no solubles). Es posible que encuentres referencias sin aclarado que también son válidas para este tipo de cabelleras.

María Baras, estilista de Pantene, hace hincapié en que el aceite capilar puede ser una buena opción siempre que se aplique de forma adecuada. Ella recomienda hacerlo en las puntas, con el pelo mojado y después aclararlo con la misión de sellar las cutículas y mantenerlas hidratadas.

Respecto a la lista de ingredientes, Susana Collar aconseja aquellos que no solo regulan la grasa, sino que también nutren en la medida que estos cabellos lo necesitan. Destaca los extractos de tilo (mantiene propiedades calmantes y antioxidantes), de pomelo, de lavanda o de bambú (aportan aminoácidos y propiedades antiseborreicas), la levadura rica en vitamina B…

Manual de uso de los acondicionadores específicos en melenas grasas

Las pautas son sencillas, pero es necesario implantarlas desde el primer día. Resulta esencial lavar con agua tibia, utilizando la cantidad adecuada de champú (“no por poner mucho lava más, más bien al contrario, ya que, si no aclaramos bien, se van sumando capas de residuos que 'taponan' la piel”, afirma Susana Collar) y masajeando suavemente el cuero cabelludo (si frotas en exceso puedes activar las glándulas sebáceas).

A la hora de aplicar tu acondicionador específico, hazlo también con la cantidad de producto justa y necesaria. “Extiéndelo solo de medios a puntas y, en el caso de utilizar acondicionadores con aclarado, retíralos con absoluta dedicación”. Seca el cabello con toallas 100% algodón, sin friccionar las cutículas y sin excederte con el secador. Un protector térmico apto para melenas grasas puede ser un gran aliado o, incluso, un aceite ligero.

Otras fórmulas que puedes tener en tu radar son un exfoliante capilar (purifica el cuero cabelludo y elimina residuos que se van acumulando y que taponan los folículos aumentando la producción de sebo), tónicos reguladores de la grasa como tratamiento con acciones purificantes y antisépticas (“muchas veces la grasa puede venir acompañada de caspa que también puede ahogar al bulbo y favorecer la temida caída capilar”) o champús en seco (son útiles, pero debes aplicarlos con medida o tendrán un efecto rebote). Algunos ejemplos de acondicionadores para cabellos grasos son…

Acondicionador Frescor Purificante Aromacología de L’Occitane

Gracias a la combinación de cinco aceites esenciales y un vinagre vegetal, el Acondicionador Frescor Purificante Aromacología, de L’Occitane (19 euros), deja un pelo fresco y ligero. Cuenta con su recarga eco.

Acondicionador Coconut Water de OGX

La fórmula de Acondicionador Coconut Water, de OGX (7,90 euros, en Amazon), incluye agua de coco, aceites naturales y proteína de huevo con la misión de hidratar, equilibrar y aporta luz a las melenas grasas.

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Acondicionador Tea Tree de The Body Shop

Con aceite de árbol de té de comercio justo y proteína de seda vegana, el Acondicionador Tea Tree, de The Body Shop (7,50 euros), refresca, hidrata y acondiciona las melenas con extra de sebo dejando un acabado ligero.

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Acondicionador Sap Moss de Aveda

Con un cóctel de musgo de Islandia y extracto de savia de alerce, el Acondicionador Sap Moss, de Aveda (29 euros), desenreda al instante y evita el encrespamiento mientras deja un acabado manejable y sin aportar peso. Además, perfuma tus cutículas.

Bálsamo Protector a la Menta Acuática de Klorane

Se postula como un escudo ante la contaminación que desenreda y facilita el peinado. El Bálsamo Protector a la Menta Acuática, de Klorane (13,60 euros, en El Corte Inglés), es biodegradable y perfecto para cabezas con un plus de sebo.

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Revive Conditioner de Maria Nila

Inspirado en la tecnología de las micelas (atrapan la suciedad), Revive Conditioner, de Maria Nila (30 euros), acaba con los residuos de forma suave, con un efecto hidratante y ligero. Sus proteínas de origen vegetal y el extracto de aloe vera permiten cuidar sin apelmazar.

Power My Hair de Montibello

Fórmula instantánea que aporta energía e hidratación y reduce el frizz en un par de pulverizaciones. Power My Hair, de Montibello (16,05 euros), es una perfecta opción para los cabellos con un plus de sebo.

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SuprAcondicionador Imperial de Nuggela & Sulé

Ideal para melenas finas y grasas, SuprAcondicionador Imperial, de Nuggela & Sulé (18,90 euros, en Amazon), cuida de la fibra, aporta brillo, facilita el desenredado y estimula el crecimiento capilar.

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