Esto es lo que realmente hace un producto efecto flash en tu piel
Su secreto está en que proporciona buena cara durante unas horas porque crea una especie de película. Varios expertos aclaran si aportan algún beneficio añadido y qué debe incluir
En esta época en la que hay tanta boda y comunión te han sacado de más de un apuro, reconócelo. Los cosméticos de efecto flash están pensados para actuar en modo Cenicienta durante unas horas y conseguir un brillo y tersura extra, así como borrar arrugas y líneas de expresión. Pero tenemos dudas sobre si añaden nutrientes a la piel, qué deben llevar o si son una mera cuestión de marketing. Porque venderse, se venden mucho: 70.000 unidades al año de las clásicas ampollas Acción Inmediata de Germinal, la marca que trajo este formato a España en los años ochenta, por ejemplo.
Según la dermatóloga y divulgadora Ana Molina, lo primero es entender que la luminosidad cutánea depende en gran parte de la superficie. La piel joven la tiene lisa, y por eso refleja la luz de forma uniforme; sin embargo, según cumplimos años y aparecen las arrugas, estas atrapan esa luz y provocan ese juego de luces y sombras que nos envejece. Lo segundo es comprender cómo funcionan estos cosméticos. “Básicamente, llevan polímeros de proteínas de alto peso molecular, que son capaces de formar una película sobre la piel, como si pusiéramos un film de cocina transparente sobre ella. Esto produce un efecto de tensado superficial temporal y ayuda a suavizar la superficie cutánea, lo que influye especialmente en la luminosidad”. Durar, no dura demasiado, no nos vamos a engañar, pero sí lo justo para 'cubrir' ese evento para el que hemos destinado el propósito: unas horas, quizá menos de las 8 que prometen los laboratorios, y aún menos si añadimos después (ojo) un producto de base acuosa o ligero, aclara la Dra. Ana Molina.
El efecto 'soft focus' es otra cosa
No hay que confundir el cosmético de acción flash con el de efecto 'soft focus' de las prebases de maquillaje y algunas bases. Básicamente, este último se emplea para preparar la piel antes de maquillarnos, y en teoría promete aumentar la duración de la base, alisar y reducir ópticamente las imperfecciones. Soft Focus significa 'borroso' porque el resultado es similar al de una foto difuminada: está pensado para rellenar las arrugas superficiales y reflejar la luz de una manera uniforme gracias a moléculas de alto peso como siliconas o dióxido de titanio, que se colocan sobre la superficie del cutis y reflejan la luz en todas las direcciones, no solo en una como cuando queremos que algo brille. “Más que mucho brillo concentrado, en este caso se obtiene una luz suave”, añade Molina. Volviendo a los cosméticos flash, según Elisabeth Álvarez, directora del centro INOUT y experta en formulación y dermo-cosmética, una buena combinación de activos podría ser la de proteoglicanos con vitamina C. “Si buscamos también un beneficio de tensión, las elegiremos con silicio o DMAE, y para hidratar, con ácido hialurónico”.
Superficialidad de base
¿Hablamos de una acción superficial o también actúan a nivel profundo? “Los productos instantáneos suelen trabajar sobre todo a nivel superficial, por eso no son un tratamiento a. largo plazo; lo ideal es incluir un cosmético antiedad en la rutina diaria y combinarlo con este flash en ocasiones especiales”, sugiere Elisabeth Álvarez. Aunque recientemente se ha lanzado algún producto en crema y sérum, la mayoría se presentan en ampolla. Pero no confundamos las que trabajan a corto plazo, como son las flash, con las que lo hacen a largo plazo, ya que existen ampollas de tratamiento con diferentes funciones: antioxidantes con vitamina C, exfoliantes con alfahidroxiácidos, hidratantes con ácido hialurónico, etc; lo único que tienen en común sería el formato.
A la hora de aplicar un cosmético de acción instantánea, y con el objetivo de que el resultado dure lo máximo posible, limpiaremos bien el rostro y aplicaremos la ampolla a toquecitos, sin arrastrar, en cara, cuello y escote. Si es crema o sérum, haremos lo propio, pero en este caso sí añadiremos los movimientos de masaje ascendentes propios de la aplicación de cualquier tratamiento habitual. Y el momento será, siempre, después de la limpieza y antes del maquillaje.
Serum Flash de Martiderm. Tras las míticas ampollas, la firma crea el formato sérum para un efecto inmediato antifatiga y luminosidad que ayuda a fijar mejor el maquillaje (14,98 € en Promofarma).
Ampollas Flash Lift de Germaine de Capuccini. Se trata de un sérum tensor de acción inmediata, reafirmante, hidratante, defatigante y homogeneizador de la textura de la piel (16,50 €).
Instant Flash Isdinceutics, de Isdin. Su fórmula es rica en péptido Q10 que consigue un trabajo de lifting inmediato, atenúa las arrugas y promete dar vida al rostro durante 8 horas. (Pack de 5 vale 17,36 € en Promofarma).
Crema Acción Inmediata Radiance de Germinal, iluminadora y con efecto buena cara que además añade escudo antiexposoma, factor de protección solar y agentes hidratantes. Reafirma, tensa e ilumina (37,65 € en Promofarma).
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En esta época en la que hay tanta boda y comunión te han sacado de más de un apuro, reconócelo. Los cosméticos de efecto flash están pensados para actuar en modo Cenicienta durante unas horas y conseguir un brillo y tersura extra, así como borrar arrugas y líneas de expresión. Pero tenemos dudas sobre si añaden nutrientes a la piel, qué deben llevar o si son una mera cuestión de marketing. Porque venderse, se venden mucho: 70.000 unidades al año de las clásicas ampollas Acción Inmediata de Germinal, la marca que trajo este formato a España en los años ochenta, por ejemplo.