Los 6 trucos para decorar tu salón con papel pintado con los mejores resultados

El salón es una de las estancias más importantes de nuestro hogar. Es donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo libre, donde reunimos a la familia o desconectamos de las preocupaciones del día a día. Por eso resulta clave a la hora de decorarlo empezar con las paredes, consiguiendo que luzcan completamente de tendencia con uno de los éxitos de la temporada, el papel pintado.

Antes de colocar los grandes muebles, lo mejor es crear el escenario adecuado, convirtiendo la estancia en un lugar relajante, con colores que inviten al descanso y el relax. Esta será una de nuestras prioridades, como también que sea un lugar práctico, cómodo y bonito. Después ya solo queda buscar los muebles perfectos, como descubriendo cuáles son los detalles a tener en cuenta para comprar el mejor sofá o sillón posible, que se ajuste a nuestros deseos y que ayude a crear armonía en la habitación.

Así, si queremos que nuestro salón se vea completamente diferente y moderno, darle una oportunidad a esta tendencia de moda es una maravillosa idea. El papel pintado se ha convertido en uno de esos must de decoración que nos ayuda a incorporar diseños nuevos, texturas y matices a nuestro salón de la forma más sencilla. Eso sí, que sea sencillo no quiere decir que no haya algunas cosas que convenga tener en cuenta, como el estilo del salón, la luz de la estancia o cómo es la pared sobre la que colocaremos el papel.

Elige el estilo antes

El primer paso antes de ponernos manos a la obra y mover los muebles para hacer espacio en el salón, es tener más o menos claro el estilo que queremos que tenga una vez terminado el empapelado y para ello hay que seleccionar el diseño que nos ayude a conseguirlo. Los tonos arena, crudos o pastel pueden ayudarte a diseñar ambientes clásicos y los diseños en blanco y negro con un toque brillante son ideales para añadir un toque más sofisticado. Con tonos neutros y colores sobrios siempre acertarás.

Consigue ambientes más clásicos y románticos gracias a los estampados florales y los estampados geométricos pueden ayudarte a lograr un toque más moderno en tu hogar, gracias a ellos puedes conseguir ese toque contemporáneo que buscabas. Las rayas también son un clásico con el que no podemos fallar.

¿Dónde lo pongo?

Si queremos que el papel pintado cubra el salón por completo, lo mejor será escoger uno sutil, es decir, que el diseño no contraste demasiado o los colores contrasten poco, tampoco es mala opción escoger un papel texturado y que sus sombras nos ayuden a diseñar un espacio diferente y único. En estos casos trataremos de evitar que el papel sobrecargue la estancia, resultado demasiado pesado y haciendo que nos cansemos de él.

Otra opción muy habitual y con excelentes resultados es escoger una pared que queramos destacar y colocar el papel solo en ella, esto lo vemos sobre todo en cocinas y baños. En estos casos es importante que la pintura del resto de la estancia vaya en consonancia. Aunque en seguida pensamos en la pared de la televisión, lo cierto es que puede ser cualquiera de ellas, como la columna de la chimenea o la que queda tras el sofá, también se puede optar por colocar hasta mitad de la pared y rematar con un zócalo, una opción original y diferente.

Cómo es la estancia

Los colores nos evocan sentimientos y emociones, nos pueden ayudar a sentirnos relajadas o más activas, pero también a lograr que la luz natural que entra en una estancia parezca mayor, haciendo que el salón se vea más amplio y luminoso. La luz es clave para decorar nuestra vivienda al completo y en el caso del salón y el papel pintado no es una excepción, por ejemplo, en estancias que no tengan demasiada luz, escoger papeles luminosos y alegres puede ser una buena idea.

La pared importa

Aunque colocar el papel pintado no es una tarea excesivamente complicada, sí hay algunos detalles que tendremos que tener en cuenta a la hora de colocarlo para que este quede perfecto. Tener en cuenta el tipo de pared sobre el que lo haremos, si es porosa, si está nivelada, si ha quedado completamente lisa y, sobre todo, si está limpia, es uno de los primeros pasos que debemos dar. Limpia y lija la superficie si fuera necesario.

Evita los errores en el montaje

También es importante medir bien la superficie que queremos empapelar para poder calcular la cantidad de material que necesitamos, si hará falta una cola específica o el papel es autoadhesivo y cuánto de este necesitaremos. No queremos pasarnos y que nos sobre mucho, pero tampoco quedarnos cortas y tener que ir a la tienda en mitad de la tarea, perdiendo el ritmo y haciendo que el proceso sea más largo.

A la hora de poner los papeles sobre la pared, es importante que el dibujo que hemos escogido encaje a la perfección, para que se vea estiloso y no nos pasemos los próximos meses arrepintiéndonos de no haber puesto suficiente atención. Al ponerlo, es importante hacerlo bien, pero también no agobiarse si queda alguna burbuja, la podrás quitar después con la ayuda de un alfiler. Para ayudar a que se seque más rápido, crea corrientes de aire.

La paciencia es clave

Espera a que esté completamente seco antes de frotar el papel para limpiarlo, esto puede tardar unos cuantos días, pero te evitará crear desperfectos. En caso de que esto sucediera, lo mejor es quitar toda la tira de papel pintado y colocar una nueva, pero también puedes sustituir el trozo dañado por otro nuevo, del mismo tamaño (una vez más, asegúrate de que el dibujo encaja a la perfección).

No hay duda de que una forma estupenda de renovar tu salón es encontrar el papel pintado perfecto, ese que te apasione y colocarlo en toda la estancia o en alguna pared determinada si solo queremos darle un toque diferente. Una forma de actualizar nuestra casa de una forma sencilla y de tendencia.