El look más calentito de Eugenia Silva tiene su lado asequible

Esta semana nuestro compaginamos nuestro día a día de oficina con imágenes en las que las influencers, modelos y fashionistas más importantes del planeta luchan con sus mejores fríos contra el frío que azota París, que esos días acoge los desfiles de la Semana de la Alta Costura. Por eso, entre copo y copo de nieve, nos ha sorprendido encontrarnos con una modelo abrigada de forma “campechana” y apetecible bajo los rayos de sol.

Eugenia Silva ha subido a sus redes una imagen en la que disfruta de una infusión -en una taza pertinentemente adorada con una ‘E’ de Cristina Oria- disfrutando del sol madrileño. La modelo se abriga con una manta de Loewe blanca bajo la que encontramos prendas asequibles en tonalidades nude que contrastan con la avalancha de abrigos acolchados de Moncler que a través de nuestro feed de Instagram estamos recibiendo.

Eugenia luce un jersey de cuello vuelto de Mango que combina con unos cálidos y cómodos pantalones a juego de H&M de estética relajada. Para embarcarse en su jornada laboral en Toledo, apuesta por un look compuesto por una ligera y elegante gabardina, camiseta blanca de estampado floral, pantalones pitillo negros y botines de estética folk.

El día de antes nos regalaba otro look perfecto para afrontar las bajas temperaturas. Se trata de un conjunto compuesto por una chaqueta larga estampada con motivos efecto patchwork y manga combinada en verde, jersey mostaza, botas de Golden Goose y collar de eslabones dorados de Aristocrazy. El imponente collar de eslabones grandes en plata de ley recubierta de oro rosa de 18 quilates cuesta 479 €, y si bien da menos calorcito que una bufanda, queda perfecto con cualquier look.

Sin duda alguna, el Instagram de Eugenia Silva se está convirtiendo estos días en nuestra guía de estilo para encontrar el look perfecto para cualquier evento de nuestra agenda. Si su colección de pantalones de Zara nos ha alegrado la semana por estar la mayoría de sus modelos en rebajas, sus últimos looks nos hacen mirar con algo más de cariño al termómetro, que no parece dispuesto a darnos una tregua.