Marta Díaz juega con los límites del dress-code del Festival de Cannes: vestido de Mario Salafranca con 3 metros de cola

Las españolas suelen ser alabadas por la prensa internacional en la alfombra roja del Festival de Cannes y este año, la influencer Marta Díaz quiere colar su nombre entre la lista de las mejores vestidas. De la mano del diseñador Mario Salafranca, con gran proyección fuera de nuestras fronteras, ha querido rendir homenaje a la elegancia clásica sin renunciar a un giro contemporáneo.

La creadora de contenido ha elegido un vestido bicolor en blanco y negro que reafirma su lugar entre las personalidades más seguidas de las redes a la vez que la postula como referente de estilo en una de las alfombras rojas más exigentes del mundo. Y es que este año el certamen ha pulido su dress-code con nuevas reglas de vestimenta amparadas en el decoro y la practicidad.

Es así que se prohíbe el uso de “vestidos voluminosos, en particular aquellos con una gran cola” y también “prendas transparentes que dejen algunas zonas del cuerpo en total desnudez”. Un aspecto con el que el equipo de diseño ha jugado: la influencer llevará una cola de 3 metros, pero nadie deja claro lo que es "una gran cola".

“Crear para una de las influencers más reconocidas del país siempre es todo un honor y privilegio para la marca”, ha reconocido el diseñador. Confeccionado en doble crepé de seda, el vestido pertenece a su colección Paris 2025, una propuesta que recupera la sobriedad del cuerpo encorsetado y las líneas limpias, realzadas por un escote en pico que aporta fuerza estructural al conjunto.

Lo que convierte el look en una pieza verdaderamente memorable es el uso de la gasa, uno de los materiales más característicos del diseñador. Salafranca es un apasionado del movimiento que proporciona este material y ha apostado por una corbata que envuelve el escote del vestido y a su vez da lugar a la cola con una largura de 3 metros. Esta pieza, que flota con cada paso, confiere al vestido una presencia escénica que lo conecta directamente con el espíritu de Cannes.

El equilibrio entre glamour y confort fue clave en la propuesta. “La sencillez y humildad de Marta nos ha llevado a crear un diseño elegante, glamuroso y sobre todo cómodo para un evento tan importante”, apunta el ideador de la propuesta. La elección de los colores, junto a la arquitectura del vestido, remite a una feminidad serena, con un sutil toque masculino que refuerza la silueta sin necesidad de artificios.

Más allá del impacto visual, el gesto de la influencer tiene un significado simbólico. “Es una satisfacción que nuestras representantes españolas apuesten por la marca Made in Spain y hagan eco en una de las alfombras más importantes de nuestra cultura, diseño y arte”, concluye el diseñador.

Con esta aparición, Marta Díaz reafirma su estatus como referente de estilo y se convierte en altavoz de una nueva generación de moda española que busca brillar dentro y fuera de nuestras fronteras. Juntos firman un momento icónico en Cannes donde moda, personalidad y talento se dan la mano.