Descubre el secreto de un brindis a la altura de un virrey

No hay un metro cuadrado en Madrid donde lo it se materialice mejor que a lo largo de los primeros números de la calle Jorge Juan. Todo allí respira el ambiente cool y cosmopolita de la capital: escaparates de moda exclusiva, arquitectura urbana majestuosa y la oferta gastronómica perfecta.

Allí, precisamente, en la calle Jorge Juan número 12, se ubica el restaurante La Máquina, que pertenece al mítico grupo madrileño homónimo que este año cumple cuarenta años. Dicen sus dueños que la esencia gastronómica de La Máquina Original es el complemento perfecto al que es considerado el mejor ambiente de Madrid y es que, distendido y divertido en la zona de la barra, el restaurante cuenta también con acogedores salones para almuerzos de negocios, familia y amigos.

El producto nacional, de tierra, mar y huerta, es sagrado en los restaurantes del grupo y se cocina al modo tradicional con el toque justo de actualidad en unas cocinas que ya han cumplido cuatro décadas, pero que siguen llenándose día tras día. Pescado y marisco tienen gran protagonismo en la carta y son famosos algunos de sus platos como la degustación de ostras, las zamburiñas en gratén de jamón y cebollita dorada, los calamares asados en su tinta, las cocochas de merluza de pincho a la plancha o, como en esta ocasión nos muestran, el virrey a la plancha.

Un brindis a la altura de un virrey

Hasta el restaurante La Máquina Original ha querido acercarse Rafael Ansón, presidente fundador de la Academia Internacional de Gastronomía, para brindar por este aniversario con el CEO del grupo, Javier Rueda. “A veces nos dicen que somos los locales de moda, pero fíjate lo que hay que hacer para que esto llegue a cuarenta años haciendo deleitar a nuestros clientes con la comida”, reflexiona Rueda.

Orgulloso de los catorce restaurantes que tienen por todo Madrid (y que pronto serán dieciséis), no quiere perder la oportunidad de brindar con Rafael Ansón. En el plato, un pescado exquisito y, en la copa, el mejor vino para acompañarlo. También conocido como alfonsino o cachucho, el virrey es un pescado muy deseado en estos momentos. Semigraso y de agua salada, su carne tiene un sabor que recuerda al marisco, muy fina y blanca, aunque turgente.

Para esta ocasión, el chef de La Máquina lo ha preparado a la plancha, una receta veraniega y sabrosa que permite disfrutar del sabor natural de este exclusivo pescado y que marida a la perfección con el vino blanco elegido: “Hemos probado con quince vinos hasta dar con el binomio perfecto entre nuestro virrey a la plancha y el vino Finca Montico de Marqués de Riscal”, explica Rueda, que aprovecha para destacar la importancia que se le da desde su grupo de restaurantes a la armonía entre comida y vino.

“Cuando el pescado está así preparado, con ajo y guindilla, hay que buscar la pareja de baile perfecta”, argumenta Rafael Ansón, que especifica: “En este caso, no sería un gran vino tinto ni con un pisco sour. Tiene sentido tomarlo con un vino blanco que tenga crianza, como es el caso de Finca Montico de Marqués de Riscal”. “¡Y bien fresquito!”, apostilla Javier Rueda antes de hacer chin, chin.

Finca Montico, un blanco exquisito de cosecha ecológica

Finca Montico de Marqués de Riscal es un vino blanco verdejo sobre lías que, en su añada 2018, pasó a formar parte de la colección de vinos 100% organic de esta bodega, procedentes de la producción ecológica que tienen en la D.O. Rueda. El mosto se decanta ligeramente y se envía a fermentar solo en presencia de sus levaduras autóctonas, sin mayor intervención. Al finalizar la fermentación, el vino permanece en contacto con sus lías finas durante, al menos, cuatro meses.

Finca Montico procede de un viñedo viejo propiedad de Marqués de Riscal, situado en el pago de El Montico, típico terreno cascajoso, pobre, de cantos rodados, capaz de proporcionar una gran tipicidad a los vinos verdejos de Rueda.

De color amarillo verdoso, en nariz tiene un marcado aroma varietal de verdejo con una intensidad media, notas de hinojo, finas hierbas, flores blancas, pera y melocotón. En boca es graso, fresco, muy untuoso y con un final largo y redondo. Una buena acidez hará que se mantenga fresco en el tiempo y conserve toda su complejidad aromática.

Finca Montico marida bien con pescados, mariscos, carnes blancas, jamón, pasta, pollo y carnes frías. La temperatura de servicio ideal es entre 8 y 10 grados.