Jaime Cantizano: su paternidad, sus secretos estéticos y sus últimos proyectos

Pocos presentadores derpiertan tanta curiosidad como Jaime Cantizano. Una intriga suscitada, en parte, por el extremo celo que este guarda acerca de su parcela privada. A sus 45 años, nunca ha sido aireada en ningún medio de comunicación. Nacido en Jerez de la Frontera (a pesar de que el grueso del público desconoce que es andaluz), siempre abandera una amplia sonrisa y ha sabido mantener una actitud estoica a pesar de lo que se ha escrito acerca de su vida fuera de los platós o estudios radiofónicos. Tras ser padre por gestación subrogada en 2016, la rumorología fue in crescedo. Basta con googlear su nombre y dejar que el buscador se pregunte con quién pasa su tiempo el gaditano.

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Tras haber cosechado multitud de éxitos nacionales y haber apostado por un proyecto autonómico en Canal Sur, Cantizano atraviesa un excelente episodio profesional gracias a su espacio en Onda Cero 'Por fin no es lunes'. De hecho, este miércoles acudirá al frenético ‘El Hormiguero’ para promocionar junto a Pablo Motos, vecino suyo en el acaudalado barrio de Salamanca, dicho magacín, que ha aumentado su audiencia favorablemente en su primer año de vida. El periodista aún gusta y sigue siendo un cebo perfecto para formatos de índole social.

Se corrobora así que Cantizano no era solo un rostro bonito que daba bien en pantalla. En 2017 se rumoreó que volvería a la televisión a través de un programa de parrilla nacional: ‘Operación Triunfo’. Finalmente no ocurrió, siendo Roberto Leal la acertada apuesta de la cadena pública.

Un ‘destierro’ televisivo que ha dado mucho que hablar, especialmente en cuanto a su renovado aspecto físico que, apartado de las cámaras, parece haber sido sometido a algún retoque estético. Así se comentaba desde diversos medios cuando el conductor apareció algo más hinchado de lo normal en sus redes sociales.

Ácido hialurónico, inyección de vitaminas, bótox y una supuesta elevación de cejas fueron algunas de las intervenciones sobre las que se hicieron cábalas. Él, de momento, nunca ha reconocido ninguna abiertamente.

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