Manolo Caro, el gran aliado de Miguel Bosé en México en sus momentos más duros

Los últimos años no han sido nada fáciles para Miguel Bosé. El 23 de enero de 2017 fallecía su sobrina Bimba víctima de un cáncer, un año más tarde llegaba la ruptura y la batalla judicial con Nacho Palau, la persona con la que compartió 26 años, por la custodia de sus hijos, y este 23 de marzo moría su madre, la emblemática actriz Lucía Bosé, a consecuencia del covid-19. Momentos muy duros en los que ha contado con el apoyo de sus familiares y amigos, entre los que se encuentra Manolo Caro, el director de la serie 'La casa de las flores', cuya tercera temporada acaba de estrenar Netflix y en la que la estrella española ha retomado su faceta como actor, que tenía prácticamente abandonada desde hace casi dos décadas.

Tras vivir algunos años en Panamá, en otoño de 2018 trascendió que se había mudado a México, donde, muy en su línea habitual, lleva una vida personal apartada de los focos. En este país, donde es un ídolo de masas, cuenta con una de sus incondicionales, la presentadora y ahora actriz Rebecca de Alba, quien también era muy amiga de su madre, la inolvidable protagonista de 'Muerte de un ciclista'; el youtuber Juanpa Zurita, quien ha alcanzado una gran popularidad por interpretar al hermano de Luis Miguel en la serie sobre el cantante en Netflix; el propio Luis Miguel en la ficción, Diego Boneta; los cantantes Benny Ibarra y Sasha Sokol, miembros de Timbiriche; Miguel Alemán, dueño de la aerolínea Interjet, y el ya mencionado Manolo Caro, quien en estos días duros para Miguel le ha mostrado públicamente su cariño y admiración en las redes sociales.

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En enero de 2019, cuando hubo algunos rumores sobre el estado de salud del cantante, después de que en el mes de noviembre le costara mucho hablar en la ceremonia de entrega de los Grammy Latinos, reaparecía en las redes sociales con Manolo Caro: "Qué cena tan rica, qué historias tan imposibles, qué placer de velada! Ya quiero ver la temporada 2 de #lacasadelasflores. Me urge!!”. Una afirmación que fue profética porque los fans de la serie mexicana (atención: spoilers) pueden disfrutar ahora de su reaparición convertido en un sacerdote. Un cameo cuyo secreto estaba muy buen guardado y que es un anticipo también de la vuelta a la gran pantalla con la película 'Córtalas', que ha rodado a las órdenes de la directora María Ripoll y que tenía un estreno previsto en más de doscientas salas en México, pero por la pandemia se ha pospuesto.

Manolo Caro ha querido en estos días agradecer el cameo que ha hecho en su serie de televisión y, además, le ha mandado ánimos a través de Twitter tras la muerte de Lucía Bosé: "Mi querido Miguel Bosé, gracias por ser parte de esta locura, no podías faltar en LA CASA DE LAS FLORES!!! Y siempre siempre hay que tirar pa'lante hasta que el corazón aguante. Te quiero".

En un encuentro con sus seguidores en las redes sociales, Manolo Caro explicó que la propuesta de participar se la había hecho cuatro días antes de que tuviera lugar la grabación y que, tras leer su monólogo, Bosé aceptó encantado: "Miguel Bosé y su mamá, Lucía Bosé, eran superfans de la serie. Incluso platiqué con Lucía de la historia, le llevé el libro (el guion) y le conté varios detalles, porque ella se juntaba con sus amigas a comentar los episodios".

Manolo Caro es en la actualidad uno de los directores más pujantes de México, aunque su vocación inicial fue la arquitectura, de hecho se formó en el Tecnológico de Monterrey, pero cuando la agencia publicitaria BBDO buscaba creativos en Ciudad de México y le contrataron, su destino cambió por completo, y posteriormente estudió dirección de cine en la célebre escuela de San Antonio de los Baños, en Cuba, antes de venir a España, donde estuvo a las órdenes de Juan Carlos Corazza, uno de los profesores de intepretación más prestigiosos de nuestro país, con el que suelen preparar sus películas Penélope Cruz y Javier Bardem.

Tras varios cortometrajes llegaría en 2013 la película 'No sé si cortarme las venas o dejármelas largas', a la que seguirían 'Elvira, te daría mi vida pero la estoy usando', 'La vida inmoral de la pareja ideal' y 'Perfectos desconocidos', remake de la italiana 'Perfetti Sconosciuti', que en España también dirigió Álex de la Iglesia. Sus admiradores, que son legión, disfrutarán próximamente de la miniserie 'Alguien tiene que morir', que rodó en España y que juntó a Carmen Maura con su musa, Cecilia Suárez, la intérprete de Paulina de la Mora en 'La casa de las flores' y gran amiga del director desde que tenía 14 años.

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La vida del director no ha sido fácil y estuvo marcada por la trágica muerte de su padre en un accidente de tráfico, lo que obligó a su madre a convertirse en agente inmobiliaria para sacar adelante a sus hijos. Otro de los momentos duros del que algunos denominan 'el Almodóvar mexicano', etiqueta que acepta como un halago, fue un secuestro del que no suele dar demasiados detalles: "Fui adicto a los ansiolíticos desde muy joven. Tuve un caso de violencia personal, sufrí un secuestro y a partir de ahí fui adicto, después los dejé a un lado y ahora me causa muchísimo morbo regresar con mis personajes a hablar de cómo la medicina te ayuda a tapar unas cosas, pero no compone otras", declaraba en la edición mexicana de 'Playboy'.

En la misma entrevista le preguntaban si perdonaría una infidelidad, a lo que respondió: "Vivimos en una sociedad donde el diálogo y la comunión o las reglas del juego ya se pueden plantear de formas tan diversas en cada pareja y no hay necesidad de engañar. Es mejor hablarlo y si quieres experimentar un trío sexual, ¿por qué no hablarlo con tu pareja? Y si se da, que ocurra con ambas partes consensuadas".