Mikel Bustamante, de policía recurrente a padre primerizo

Mikel Bustamante está rozando con los dedos uno de los grandes sueños en la vida de un actor: conseguir un Premio Goya. Un galardón en el que desde que se otorgara por primera vez, en 1987, han triunfado grandes nombres del cine español como Banderas, Bardem o Antonio de la Torre.

Su papel como Javi en la cinta ‘Cinco lobitos’ le ha supuesto a Bustamante la nominación de la Academia y le está dando grandes alegrías a nivel personal. En breve, en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla, se verá las caras con otros cuatro talentos ‘descubiertos’ este año: Telmo Urureta, sobrino de la famosa actriz Elena Urureta, Christian Checa, Albert Bosch y Jordi Pujol Dolcet.

Bajo la dirección de Alauda Ruiz de Azúa, directora a la que su maternidad le inspiró para crear la cinta que se proclamó vencedora de la Biznaga de Oro en el Festival de Málaga, ha conseguido éxito entre crítica y taquilla, pero lo cierto es que su carrera se ha movido entre teatro, cine y televisión desde hace varios años.

Para Bustamante, que nació en la localidad alavesa de Amurrio en 1986, es cierto eso que dicen de “cuando se cierra una puerta, se abre una ventana”. La puerta fue el casting fallido para participar en la serie ‘Patria’, en la que curiosamente sí participó la tía de Telmo Irureta, Elena Irureta, nominado al Goya en la misma categoría que Mikel, y la ventana fue la llamada en la que le confirmaron que desde casting no le veían para la serie de Félix Viscarret y Óscar Pedraza, sino para interpretar un pequeño, pero recurrente, papel de policía en ‘La casa de papel’.

A raíz de este papel, en el que pudimos ver a Bustamante como ‘Martínez’ en tres temporadas, el rostro del joven actor comenzó a sonarnos más. "Vengo de hacer mucho teatro, cortometrajes y pequeños papeles en series, pero cuando trabajas en una producción más grande, se confía un poco más en ti", contaba al diario ‘Gasteiz Hoy’.

Con 22 años, el actor tuvo claro que quería dedicarse a la interpretación y se fue a vivir a Madrid. Comenzó haciendo mucho teatro y se hizo un pequeño hueco en la televisión. Su primer papel en televisión fue en 'Acacias 38' durante 12 capítulos y después fue obteniendo diferentes papeles en televisión y cortometrajes.

Otra de las películas en las que participó fue ‘Maixabel’, cinta por la que vimos a Blanca Portillo recogiendo el Goya en 2022 y en la que interpretaba a Patxi Makazaga, asesino del político Juan María Jáuregui. Ahora es él quien sabe lo que es afrontar la alfombra roja y ser candidato al Goya.

Afirma que estuvo "más nervioso que nunca" a la hora de saber si finalmente era o no nominado, ya que dice que veía y leía diferentes quinielas e informaciones los días previos al anuncio y que eso le puso más nervioso que saber si ganaría finalmente.

“Cuando anunciaron la nominación me quedé muy a gusto. Si gano va a ser genial y lo disfrutaré mucho, pero, con la nominación, ya me he quedado muy satisfecho” señaló a ‘Murcia Plaza’. Queda muy poco para saber si finalmente se hace con el Goya en esta ocasión o tiene que esperar a un futuro para volver a estar entre los ‘elegidos’.