Es noticia
Menú
Las plebeyas que pudieron reinar
  1. Noticias
NOTICIAS

Las plebeyas que pudieron reinar

El mundo está lleno de plebeyas que en su día se codearon con las familias reales. Fueron novias de príncipes o herederos al trono que, por

Foto: Las plebeyas que pudieron reinar
Las plebeyas que pudieron reinar

El mundo está lleno de plebeyas que en su día se codearon con las familias reales. Fueron novias de príncipes o herederos al trono que, por determinadas circunstancias, no lograron su meta. Unas han tenido suerte en la vida, mientras que otras no han podido soportar la presión de ser una ‘ex’ de alta alcurnia. Sin embargo, a todas ellas y a sus complejas vidas les dedica un reportaje el último número de Vanity Fair. Y es que Europa está llena de Evas Sannum.

La tipología de princesa ha cambiado a lo largo de los años. Antes se buscaban a jovencitas aristócratas y discretas que tuvieran el don de cerrar la boca. Ahora, ya se ha superado esa fase. Y quizás una de las primeras en hacerlo, de acuerdo con la revista, fue Diana de Gales. Aunque a Carlos de Inglaterra le costó mucho decidirse -nadie le quería- al final encontró en Lady Di la madre perfecta. Pero diez años después, ella contó sin reparos ante las cámaras su desgraciada vida. Y es que las candidatas antiguas debían tener un pedigrí especial, como los perros.

Pero la monarquía británica tiene más cadáveres reales. Durante mucho tiempo, a principios de los ochenta, el joven Andrés salió con la actriz Koo Stark. Todo iba viento en popa hasta que se descubrió que ella había rodado una escena lésbica en una película erótica. La noticia saltó hasta la prestigiosa BBC que, como todos, dijo que Koo no estaba a la altura. La presión puso fin a este noviazgo, y ella, sola ante el peligro, denunció a numerosos periodistas. Pero ha tenido mala suerte en la vida. Embarazada de ocho meses y a punto de casarse con un millonario, éste la plantó en el altar. Distinto es el caso de Eduardo de Inglaterra y Ulrika Jonsson. Tras un breve noviazgo, ella se convirtió en un personaje más de la prensa rosa vendiendo exclusivas a su antojo.

Caso español

Vanity Fair dedica un amplio espacio a la ‘ex’ del Príncipe Felipe. Y es que nuestra monarquía no es ajena a los escándalos plebeyos del corazón. La primera en llegar fue Isabel Sartorius, una chica de clase alta pero con una sangre poco azul. El noviazgo fue muy duro y se relacionó incluso a los amigos de su madre con el tráfico de drogas. Tras muchas tensiones y el poco apoyo de los Reyes -los Borbones no se casaban con plebeyas-, la pareja rompió y ella huyó a Londres. Aunque ha intentado desde entonces pasar desapercibida, no siempre lo ha logrado.

Pero luego llegó Eva Sannum, una modelo noruega de ropa interior. La cosa fue todavía peor. Fue duramente criticado su escotado vestido azul en una boda y sus fotos en topless. Se la consideraba una plebeya sin educación para ser reina. Y así fue. Rompió con don Felipe y ella se desvinculó de la monarquía española pese al acoso que sufrió en su país. Sin embargo, el listón parece haber cambiado porque a Letizia no se le dedica ni una línea. Ella logró lo que se negó a sus antecesoras.

También con un problema por ser modelo de ropa interior está Katja Storkholm y el Príncipe Federico de Dinamarca. La pareja salió tres años y estaban muy enamorados, pero en los círculos reales ella no era vista con buenos ojos. Al final, todo acabó en ruptura y ella lo pasó muy mal. Sin embargo, Mary, la actual esposa del heredero danés, todavía tiene celos de su antigua rival. Pero peor es el caso de Estefanía de Mónaco. Tiene tantos antiguos amantes que ser novio suyo está muy desprestigiado. De hecho, de acuerdo con Vanity Fair, sus antiguos novios están a la altura de trapecistas o guardaespaldas. ¿Quién quiere más?

El mundo está lleno de plebeyas que en su día se codearon con las familias reales. Fueron novias de príncipes o herederos al trono que, por determinadas circunstancias, no lograron su meta. Unas han tenido suerte en la vida, mientras que otras no han podido soportar la presión de ser una ‘ex’ de alta alcurnia. Sin embargo, a todas ellas y a sus complejas vidas les dedica un reportaje el último número de Vanity Fair. Y es que Europa está llena de Evas Sannum.