Tendencias y consejos claves para acertar con tu ramo de novia

Todo los detalles que rodean a un enlace suelen ser aspectos que se cuidan al máximo, desde en qué fecha se va a celebrar hasta qué vela aromática colocarás en los baños. Sin embargo, si pensamos en uno de los más importantes para cualquier boda, es inevitable no fijarnos en él: el ramo de novia.

Un conjunto floral que va ligado a las contrayentes, aunque cada vez se suman más novios a lucirlos, que no escapa a las modas y a las tendencias de cada temporada. Aunque, más allá de lo que se lleve y lo que no, lo más importante es sentir que has acertado con tu ramo. Una tarea para la que te vendrá de fábula estos tres consejos que siempre aplican los floristas expertos.

Al diseñar un ramo de novia para una boda es imprescindible imaginar el conjunto. Más allá de las tendencias, aunque puedes estar atenta a ellas, no te sentirás cómoda si no casa realmente contigo.

Es decir, si están de plena actualidad los diseños florales campestres, pero tanto tu vestido, como tus joyas y el lugar de la celebración son superurbanitas, minimalistas y de líneas depuradas, quizás no quede tan bien como imaginabas una propuesta floral rústica. Mejor opta por la que se adapte a tu traje de novia, decoración, etc.

De nuevo buscando que se adapte a ti, en este caso nos centramos en tu propia silueta. Al igual que ocurre con complementos como los bolsos o los pendientes, habrá ramos de novia que te favorezcan más según tu figura. Si eres muy pequeña y delgada, quizás no te sientas tan cómoda con un ramo cascada XXL que te hace ver más menuda.

Mientras que si eres muy alta y más voluminosa, un pequeño diseño en vertical puede no ser la mejor idea. Además, si buscas estilizar la figura, una propuesta más vertical quedará mejor, mientras que una más horizontal será ideal si quieres verte más alta.

Por último, y el más importante de todos los consejos es que vuestra boda debe ser un reflejo de vuestros gustos. Así, no importa que este año se lleven los ramos de flores silvestres, con diferentes alturas y grandes flores en tonos pastel muy similares.

Si deseas un clásico bouquet equilibrado con pequeñas rosas blancas y un detalle muy colorido en azul o morado, adelante. Las modas siempre (o casi) son pasajeras. Sin embargo, si eliges la opción que personalmente más te refleje a ti misma, con el paso del tiempo no te arrepentirás de tu decisión.