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Inés Domecq y su nueva lección de estilo con vestido de invitada de Roberto Diz
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Inés Domecq y su nueva lección de estilo con vestido de invitada de Roberto Diz

Como es habitual cuando acude a una boda, la diseñadora jerezana vuelve a confiar en la aguja de su amigo para crear su último gran look de invitada

Foto: La diseñadora Inés Domecq. (Instagram/@robertodiz)
La diseñadora Inés Domecq. (Instagram/@robertodiz)

El caso de Inés Domecq es, cuando menos, curioso. Con una marca de moda que enamora por igual a famosas y mujeres de la jet set, IQ Collection, una enseña que no necesita presentaciones; una personalidad de estilo tan innata como arrolladora y arrastrando, año a año, el título de invitada perfecta, cuando tiene que asistir a una cita social, la afamada diseñadora no tira de sus propias colecciones.

En cambio, sí lo hace para el día a día. La aristócrata es la mejor embajadora de la firma que capitanea junto a Virginia Pozo, su socia. Luce y presume de los looks más rompedores y con ellos inspira a otras. Así lo hizo el pasado mes de abril en el desfile de la colección primavera-verano que tuvo lugar en el palacio de las Dueñas en Sevilla.

Para esta presentación, la jerezana se enfundó en uno de los nuevos vestidos de su marca. Un diseño exclusivo fabricado con un tejido de color nude decorado con un motivo geométrico multicolor en las mangas y en la falda. Seña de identidad en IQ Collection, destacó el patrón con los hombros picudos, mangas abullonadas, escote en V, costuras drapeadas en el pecho, fajín plisado, falda en línea evasé y largo midi. Lo dicho, un modelo que brotó de su mente creativa y que la marquesa de Almenara estrenó como modelo.

Sin embargo, si lo que tiene marcada en su agenda es una boda de amigos, Inés Domecq ignora sus diseños y acude al taller de Roberto Diz en busca de un estilismo único. Y así, una y otra vez: atuendo de invitada que la aristócrata lleva de él, look que de manera automática asciende a los altares de la moda, alcanza el calificativo de lookazo y se viraliza. Como el último.

Sobra añadir que es un tándem de moda, el de Domecq-Diz, que funciona a las mil maravillas. "La asombrosa elegancia de Inés Domecq luciendo absolutamente impresionante con un vestido en la boda de una amiga", con estas palabras el gallego publicó en su perfil de Instagram el nuevo modelo que había confeccionado a medida para su querida amiga y musa.

"Inés fue la primera persona que me compró una prenda de vestir. La primera vez que la vi, ella tenía 17 años. Entró en aquel minúsculo taller de Jerez de la Frontera vestida con una camiseta rota, un pantalón de gaucho, unos taconazos dorados y una gorra. Me compró un mono de gasa transparente de mi primera colección para ir a una boda. Me quedé fascinado con ese derroche de personalidad y estilo", relató Roberto Diz en una entrevista para Vanitatis.

A lo que el diseñador añadió. "A Inés y a mí nos une una amistad tan fuerte, tan potente y de tantos años que, creando juntos prendas y looks, nos divertimos muchísimo." Ella, como Diz, es diseñadora y empresaria de moda, aunque a la hora de enfundarse en un estilismo de invitada, confía a ciegas en Diz. Él crea y ella convierte en éxito todo lo que se pone.

Recuperando su nuevo traje, es toda una lección de estilo. Confeccionado combinando dos tejidos, uno elástico para el cuerpo y otro de organza para la falda, el vestido presenta un único color: el azul noche, o en otras palabras, en cuestiones cromáticas, el sumun de la elegancia atemporal. De cuello alto, con cierto volumen en los hombros, manga larga y silueta ceñida, la parte superior de la prenda se remató con una ristra de botones vintage. Enmarcando la silueta, un minicinturón de piel. Debajo, la pieza que compone la falda. Brotando a la altura de las caderas con unas costuras fruncidas que dan paso a una falda voluminosa de largo midi con bolsillos laterales.

Un vestido ideado por Roberto Diz que, dada su imagen impecable y dotada de sofisticación, no necesita prácticamente aderezos. Por este motivo, la jerezana no sumó grandes accesorios y apostó un bolso XS con correa de cadena de Bulgari (en concreto, el modelo Serpenti Forever bicolor), unas sandalias negras con plataforma y tacón de aguja, brazaletes dorados y pendientes a juego.

Capaz de aunar sofisticación y tendencias en sus atuendos, siempre sin perder su personalidad de estilo, Inés Domecq (aliada de la aguja maestra de Roberto Diz) vuelve a revalidar el título de invitada de boda perfecta.

El caso de Inés Domecq es, cuando menos, curioso. Con una marca de moda que enamora por igual a famosas y mujeres de la jet set, IQ Collection, una enseña que no necesita presentaciones; una personalidad de estilo tan innata como arrolladora y arrastrando, año a año, el título de invitada perfecta, cuando tiene que asistir a una cita social, la afamada diseñadora no tira de sus propias colecciones.

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