Esta es la mejor hora para desayunar y no engordar, según la ciencia

Muchos son los factores que influyen en nuestra alimentación. Tendemos a centrarnos en lo que comemos, elaboramos menús que sean equilibrados, en los que aparezcan todos los nutrientes y macronutrientes que nuestro cuerpo necesita y en las proporciones adecuadas.

Miramos que sea variada, para que todos los alimentos tengan su espacio, haciendo especial hincapié en aumentar el consumo de frutas y verduras, pero también eliminando aquellos que no favorecen en absoluto a nuestra salud, como pueden ser los ultraprocesados o el exceso de otras sustancias, como el azúcar o las bebidas alcohólicas.

Esto en ocasiones puede parecer suficiente, pero no siempre lo es. Es más que recomendable no perder de vista que, para una vida más saludable, hay otros factores que tenemos que tener en cuenta, además de la alimentación, como el ejercicio físico y llevar una vida activa, también cuidar nuestra salud mental. Sin embargo, tampoco conviene olvidar la importancia que tienen los horarios a la hora de sentarnos a comer.

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La mejor hora para desayunar

Es importante establecer un horario en nuestras comidas, tanto si lo que buscamos es adelgazar como si este no es el caso, porque no solo nos ayuda a organizar el día, también hará que nos sintamos mejor. Los humanos tenemos un reloj interno que establece su propio ritmo para algunas funciones básicas, como la digestión y la absorción de nutrientes. Este puede ayudarnos a establecer estos horarios de comida y, de este modo, favorecer el funcionamiento del metabolismo.

De hecho, según un estudio de la Universidad de Tel Aviv, existe una hora a la que conviene desayunar si queremos evitar ganar peso. Lo ideal es hacerlo antes de las 9:30 de la mañana, porque es la hora a la que nuestro cuerpo metaboliza mejor. Durante estas horas, el cuerpo transforma en energía todo lo que comemos.

También recomiendan esperar un poco de tiempo desde que nos levantamos hasta que desayunamos, por lo menos una hora.

Para poder aguantar toda la mañana sin desfallecer y con los niveles de energía altos, se recomienda hacer un pequeño almuerzo a media mañana. Si bien lo ideal es tomar una pieza de fruta, este también puede ser un tentempié de otro tipo, como un yogur con un puñadito de frutos secos.

No obstante, otros expertos, como el profesor de epidemiología genética en el Imperial College de Londres, Tim Spector, establecen que lo mejor es dejar 14 horas de ayuno entre la hora de la cena y la del desayuno, lo que podría atrasar el desayuno hasta después de las 11 de la mañana. En este caso sería un tipo de ayuno intermitente.