5 trucos para comer bien este verano, y no engordar, incluso tomando helados

Sin importar la época del año, la búsqueda de una vida saludable incluye la unión de diversos pilares, entre ellos el deporte, la salud mental y la alimentación. Precisamente enfocándonos en este último, la nutrición juega un papel fundamental para estar sano por dentro y por fuera. Por ello, del consejo de Boticaria García sobre el chocolate a las propiedades de una famosa hierba aromática para bajar el colesterol o la fruta que ayuda a activar el cerebro, son muchos los aspectos que hemos analizado en la cocina.

Hábitos en pro de la salud que no deben olvidarse en verano ni en las vacaciones, aunque puedan relajarse. Así, si se quiere seguir comiendo bien en verano, y no sumar los kilos más habituales de esta época, estos 5 consejos de experto son ideales para disfrutar de los placeres estivales, sin perder una rutina saludable.

Comenzamos con uno de los clásicos del verano, los helados. Además de poder hacer opciones de helado caseras con yogur o zumos de fruta, la nutricionista Clara Muñoz, explica que dentro de los industriales no todos son lo mismo. "No todos los helados son iguales en términos de contenido calórico y nutricional", explica la experta en su libro 'Alimentación consciente: cómo disfrutar de la comida sin culpa'. A la par que añade que los helados a base de agua, como los sorbetes, suelen tener menos calorías que los helados cremosos.

Resulta también muy importante controlar las porciones. La dietista María López, destaca en su libro 'Guía práctica de nutrición: mantén tu peso en todas las estaciones' la importancia de disfrutar de todo, pero en cantidades conscientes. "No se trata de privarte de lo que te gusta, sino de ser consciente de cuánto estás consumiendo", dice López.

Ideas para comer sano en verano

Además, como tercer truco de profesional, la nutricionista Clara Muñoz también recomienda planificar las comidas y los aperitivos con antelación para evitar comprar productos ultraprocesados en las escapadas al campo, la playa o la piscina o pedir comida a domicilio en demasiadas ocasiones. "Durante el verano, es fácil caer en la tentación de comer fuera de casa y optar por alimentos poco saludables. Planificar tus comidas y llevar snacks saludables, como frutas frescas o frutos secos, puede ayudarte a mantener el control y evitar recurrir a alimentos procesados", reveló en una entrevista para la 'Revista Salud Integral'.

Por su parte, Pablo Ojeda recordó en una conferencia sobre nutrición que, más allá de los alimentos en sí, otro consejo para mantener unos hábitos saludables en las vacaciones es el de diferenciar el hambre de las ganas de beber agua: "Muchas veces confundimos la sed con el hambre, lo que nos lleva a comer en exceso. Mantenerse bien hidratado es esencial, especialmente en verano. Limitar el consumo de alcohol también es clave, ya que las bebidas alcohólicas no solo añaden calorías vacías, sino que también pueden aumentar el apetito".

Finalmente, se debe destacar que lo largo de estos meses de verano también resulta fundamental mantener la actividad física, mejor aún si es al aire libre. Aunque no está realizado directamente con la alimentación, moverse también es clave para estar bien. "Caminar, nadar o andar en bicicleta no solo es divertido, sino que también quema calorías adicionales", revelaba el nutricionista Pablo Ojeda en 'Nutrición y deporte: el equilibrio perfecto para tu bienestar'. De hecho, una simple caminata de 30 minutos tras la comida ya puede marcar la diferencia. Aunque ante cualquier duda o consulta sobre cómo evitar engordar en verano, lo ideal siempre es consultar con un profesional sanitario o de la nutrición.