Máxima, Rania o Kate confirman que la diadema es el accesorio definitivo para el pelo
Como referentes de estilo, la royals europeas han hecho gala de todas las tendencias, también en complementos para el cabello
Una parte importante de los estilismos de las royals son los accesorios. A menudo, son los culpables de que un look que podría haber pasado más que desapercibido se convierta en un éxito, especialmente si estos están situados en el cabello transformando completamente el peinado.
Algunas mujeres de la realeza como Máxima de Holanda han hecho de sus tocados, su sello de identidad. Sin embargo, hay un complemento para el pelo que han llevado, en alguna ocasión, todas y cada una de las royals con gran acierto: la diadema. Repasamos algunos de sus estilismos con esta pieza.
No podemos hablar de royals asiduas a las diademas sin mencionar en primer lugar a Kate Middleton. Aunque no con tanta frecuencia como Máxima de Holanda, la duquesa de Cambridge ha lucido adornos en su pelo en numerosos compromisos oficiales decantándose, la mayoría de veces, por tocados en forma de diadema.
En el bautizo de su hijo Louis, en la misa navideña de Sandringham, en el llamado Festival del Recuerdo... De todas las veces que Kate ha llevado diadema, hemos seleccionado dos: la que se puso en su visita a Irlanda de Jane Taylor London, básica y de terciopelo (puedes encontrar modelos muy similares en tiendas como Zara), y con la que se peinó para el bautizo de su sobrino Archie, un diseño trenzado en color teja de Juliette Botterill Millinery.
Como comentamos, Máxima de Holanda es la reina de los tocados, pero sobre todo de los sombreros y pamelas XL. Son contadas las veces que se ha decantado por una diadema, pero cuando lo ha hecho ha realzado sus estilismos con gran éxito.
La reina de Holanda eligió este accesorio para visitar a la reina Isabel II en el palacio de Buckingham. Una diadema en color rosa pastel adornada con pequeñas lentejuelas que combina a la perfección con su traje chaqueta de Claes Iversen. Además, hizo lo propio en una conferencia con motivo del 70º aniversario del Consejo Social y Económico en La Haya, eligiendo un vestido en uno de sus colores favoritos: el naranja y diadema-turbante a juego.
Si en el caso de Kate Middleton o Máxima de Holanda hemos visto diademas que llaman poderosamente la atención, Rania de Jordania se ha decantado por modelos más discretos en las apariciones públicas que ha hecho con este accesorio.
La primera vez, hace quince años, cuando asistió a un desfile militar de la Academia de Sandhurst en lnglaterra, optó por una tiara fina de lentejuelas ligeramente rosada a juego con sus pendientes. Más recientemente, pudimos verla con la diadema zigzag que en su momento fue una auténtica revolución y ella supo utilizar de manera impecable modificando su melena con un peinado repleto de elegancia.
Son pocas las veces que ha llevado diadema, pero cuando lo ha hecho ha dejado a todo el mundo sin palabras. La reina Letizia optó por este complemento para dos a actos muy significativos: la ceremonia de la Orden de la Jarretera y la entronización del emperador Naruhito en Japón.
Para el primer evento, estrenó un vestido de la firma sevillana Cherubina que combinó con una diadema negra de buntal con adorno lateral y velo de rejilla de la misma marca (en concreto, el modelo Black Peony). En su visita al país asiático, sorprendió con un tocado de otra firma, también sevillana: Nana Golmar. Una diadema confeccionada en rafia y terciopelo rosa empolvado con la que peinó su melena hacia atrás, ondulando un poco las puntas.
Una parte importante de los estilismos de las royals son los accesorios. A menudo, son los culpables de que un look que podría haber pasado más que desapercibido se convierta en un éxito, especialmente si estos están situados en el cabello transformando completamente el peinado.