Los secretos de la boda de Guillermo y Kate, al descubierto en un documental

Diez años después de que se casaran, este documental cuenta la historia de la boda de los duques de Cambridge a través de los recuerdos de las personas que estuvieron allí. Así resumía el canal inglés ITV el documental que emitía ayer noche sobre el enlace real titulado 'The Day Will and Kate Got Married'. Durante una hora, el programa se adentró así en los preparativos de la boda de Kate y Guillermo celebrada en 2011.

Sin duda, el gran atractivo antes de la emisión era Gary Goldsmith. El tío Gary, hermano de Carole Middleton y antiguo propietario de la que los tabloides británicos apodaron 'la Maison de Bang Bang' en Ibiza, por el supuesto libertinaje que allí se llevaba a cabo, concedía aquí su primera entrevista.

Está considerado la oveja negra de la familia. Y no en vano, ya que su última aparición en los medios de comunicación fue tras testificar en el juzgado por agredir a su mujer cuando salía de un taxi, lo que le costó 5.000 libras de multa y 12 meses de orden de alejamiento. Pero para ITV pesó más el hecho de contar con un pariente de Kate que su poco ejemplar pasado.

Goldsmith señala en el documental que la historia de amor de su sobrina "es como un cuento de hadas". También añadió que "venimos de una familia muy humilde. Mi padre era pintor y decorador, mi madre era contable y su nieta mayor estaba en la abadía de Westminster a punto de casarse con el futuro rey de este país".

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Para alegría, suponemos, de su familia, el tío Gary logró llegar al final del documental sin decir nada que les dejara en mal lugar. Aunque sí admitió alegremente que, tras recibir una llamada de su hermana pidiéndole que no comentara el hecho de que Kate había empezado a salir con el príncipe Guillermo, colgó el teléfono e inmediatamente presumió ante sus compañeros de trabajo: "¡Creo que voy a ser el tío de la futura reina!".

Los secretos de la boda real que tuvo lugar el 29 de abril de 2011, cuando 36,7 millones de británicos sintonizaron sus televisores para ver a Kate y Guillermo darse el 'sí, quiero', continuaron con los testimonios de otros protagonistas del evento. Entre ellos, la bordadora Gemma Murray, que trabajó en el encaje del vestido de novia de Kate diseñado por Sarah Burton, y del excomandante de la Policía Metropolitana Bob Broadhurst, que estuvo a cargo de la seguridad ese día.

El programa también reveló las presiones a las que se vio sometida la pastelera Fiona Cairns para crear la tarta de frutas de ocho pisos para el enlace. Cairns relata con cierta ironía: "Me dijeron que Su Majestad vendría a charlar a mediodía, así que ninguna presión, por supuesto, al no haber hecho nunca una tarta así".

"Cuando la reina vino a vernos, la tarta no estaba completamente terminada y recuerdo que me dijo: 'He oído que habéis estado desmontando mi casa' y le respondí: 'Bueno, tuvimos que quitar una puerta de la sala de abajo para que pasara el carro con la tarta'. Pero al final se volvió a poner todo en su sitio, así que todo salió bien".

Muy lejos de la tormenta provocada por la entrevista con Oprah de los duques de Sussex, el documental sobre Kate y Guillermo tuvo un tinte amable, aunque algunos medios ingleses han criticado el tono en ocasiones de la voz de off.

Por ejemplo cuando aseguraban que una joven Kate había sido aceptada en la Universidad de Edimburgo antes de decidirse por St. Andrews, donde estudiaba el príncipe. "Pero por razones desconocidas tuvo un repentino cambio de planes", aseguraba el comentarista, dando a entender quizá las intenciones 'cazafortunas royal' de la futura duquesa.