Nervios, abrazos y emoción: así hemos vivido el ingreso de Leonor en la Academia Militar

La princesa Leonor acaba de dar un nuevo e importante paso en su trayectoria institucional como heredera al trono con su ingreso en la Academia General Militar de Zaragoza, donde acaba de iniciar su formación militar, que se va a prolongar durante tres años. La primogénita de los reyes Felipe y Letizia sigue de este modo los pasos de su padre y su abuelo, Juan Carlos I, quienes también comenzaron en Zaragoza su singladura castrense.

Pasadas las 12 de la mañana hacía su entrada en la institución militar zaragozana la Princesa, al lado de sus padres y de su hermana y del Teniente Coronel del Primer Batallón, David Jiménez Blanco. A su llegada, comentaba a los medios de comunicación que la aguardaban que ha venido "muy ilusionada, con ganas y con nervios". A lo que su padre añadía que "siempre un poco de nervios hay que tener", como recogía 'El Heraldo de Aragón'.

La Princesa se convertía de este modo en la dama cadete Borbón para comenzar el primero de los tres años de formación militar como una soldado más, lo que implicará compartir habitación con otras alumnas, comenzar la jornada a las 6:30 horas o disponer de pocos permisos. Leonor de Borbón, que el próximo 31 de octubre cumple 18 años, tiene por delante una formación “dura y exigente”, como se recoge en la bienvenida de la AGM, aunque en su caso solo estará un año en la General, en vez de los cinco habituales para ser teniente, y después proseguirá otros dos cursos en las academias de la Armada y del Aire.

* Si no ves correctamente este formulario, haz click aquí

Portando su maleta y luciendo el pelo recogido en una coleta y una sencilla camisa azul, como look previo a su próxima vida de uniforme, la heredera al trono se fundía en un gran y tierno abrazo con su madre, protagonizando así una de las imágenes que quedarán para el recuerdo en esta histórica jornada.

La Reina elegía para despedir a su hija un traje de dos piezas en crudo y zapato plano, mientras que la infanta Sofía optaba por recuperar una blusa estampada de Zara superventas. En las próximas horas, madre e hija harían también las maletas para viajar a Sídney, donde asistirán a la final del Mundial de fútbol femenino entre nuestra selección e Inglaterra.

Terminada la despedida de sus padres y de su hermana, la heredera al trono encaminaba sus pasos hacia la pista de deportes, donde le esperaba el jefe del batallón uno. La Princesa ha cumplido los trámites habituales como una cadete más, entregando su documentación, la cartilla y certificados de vacunación y su número de afiliación propio de la seguridad social. Además de notificar un número de cuenta bancaria para los ingresos y los gastos que pueda hacer en la academia, aunque ya había trascendido que no iba a cobrar los 400 euros que el Ministerio de Defensa paga a los alumnos.

TE PUEDE INTERESAR

El macuto de la princesa Leonor para la Academia en Zaragoza: dos despertadores, redecilla para el moño y zapatillas deportivas

Paloma Barrientos

A partir de ahora, Leonor se unirá a otras 'princesas soldado' europeas y cambiará su ropa 'de civil' por los atuendos reglamentarios de la academia: el traje gris para asistir a clase; el de diario, de color caqui; el de gala; el de camuflaje para las maniobras y la ropa deportiva, si bien podrá usar sus propias zapatillas para hacer ejercicio siempre que sean "de forma y colores discretos", como dictan las normas de la institución.

Durante sus dos primeras semanas de estancia en la Academia Militar de Zaragoza, la princesa abordará la fase de "acogida, orientación y adaptación a la vida militar", en la que son alojados en las camaretas, pasan por la peluquería, se les entrega el equipo militar básico y reciben las primeras sesiones de instrucción y desfile. En junio del próximo año, se despedirá como alférez alumna.

La formación de la que será la primera mujer en ostentar el mando supremo de las Fuerzas Armadas cuando llegue al trono proseguirá en el curso 2024-25 en la Academia de la Armada en Marín (Pontevedra) y al año siguiente, en la del Aire de San Javier (Murcia), con el fin de que se dote de un adiestramiento integral.