Es noticia
Menú
El macuto de la princesa Leonor para la Academia en Zaragoza: dos despertadores, redecilla para el moño y zapatillas deportivas
  1. Casas Reales
DISCIPLINA Y RAPIDEZ

El macuto de la princesa Leonor para la Academia en Zaragoza: dos despertadores, redecilla para el moño y zapatillas deportivas

La heredera tendrá que preparar algunas cosas muy específicas para su estancia en el centro donde comenzará su formación militar este jueves y en donde pasará todo este curso

Foto: La princesa Leonor, el pasado julio en Girona. (Limited Pictures)
La princesa Leonor, el pasado julio en Girona. (Limited Pictures)

Este jueves, 17 de agosto, la heredera al trono se convertirá en la dama cadete Borbón. Nada de Leonor, ni princesa, ni alteza. Tampoco tuvo tratamiento su padre, el rey Felipe, que fue el caballero cadete Borbón. El apellido lo llevará Leonor bordado en la camisa del uniforme que le entregarán el día de su incorporación a la Academia de Zaragoza ya como militar. Esa mañana, la princesa Leonor cambiará la maleta con sus pertenecías más personales por la ropa uniformada y el macuto que la acompañará en las maniobras. También se le hará entrega de un ordenador y de libros para el desarrollo de las clases. La única diferencia con el resto de sus compañeros es que en el caso de la heredera no recibirá los 417 euros que perciben el resto de cadetes, aunque sí tiene acceso a los cajeros de los dos bancos que hay dentro del recinto.

La princesa de Asturias, igual que otros compañeros con padres militares, ha recibido indicaciones que sólo saben los que han pasado por las instalaciones de Zaragoza. Esas recomendaciones de utilidad empiezan por llevar poca ropa civil, zapatillas de deporte puestas desde la llegada y dos despertadores. En el primer caso porque la camareta (así se llama en el ejército la habitación) es compartida con otras damas cadetes y cada una con un armario de escasas dimensiones y donde cabe lo justo. Las deportivas cómodas y usadas. Las ampollas ya vendrán con las botas y la primera carrera. Esa primera mañana ya comienza una instrucción mínima, con los cadetes vestidos aún de civil para que aprendan a formar. Todo rápido y sin posibilidad de cambiarse. Con lo cual, quien no lleva un calzado apropiado lo pasa mal.

placeholder Leonor, el pasado julio en la Academia Militar de Zaragoza. (EFE/Javier Cebollada)
Leonor, el pasado julio en la Academia Militar de Zaragoza. (EFE/Javier Cebollada)

Hay anécdotas que se recuerdan en la Academia Militar de Zaragoza de esas primeras carreras, para las que algunos cadetes sin indicaciones ni experiencia familiar llevaban mocasines y resultó el primer suplicio. Después ya llegan otros asuntos diferentes como levantarse a las 6:30 de la mañana y en quince minutos pasar por las duchas, vestirse y dejar la cama hecha para pasar al comedor y desayunar.

"La primera semana es un estrés, después ya te acostumbras y da tiempo a todo. Y una cosa que aprendes es a vestirte muy rápido. No puedes dejar hecho el nudo de la corbata la noche anterior y tampoco tener abotonado el uniforme o la camisa. Hay brigadieres que pasan y, si te pillan, te hacen hacer y deshacer la corbata veinte veces o más. Lo mismo con el resto de uniforme. Es una manera de que los cadetes tengan claro lo importante que es la disciplina. El primer trimestre es duro pero después te acostumbras, como le sucederá a la Princesa. Y desde luego los compañeros van a protegerla. Para todos es un honor compartir esa experiencia militar con la que va a ser el mando supremo como Capitan General de las Fuerzas Armadas”, nos explica un ex alumno de dicha Academia. Precisamente los mejores amigos del rey Felipe son compañeros de su época militar.

placeholder El Rey, en la clausura Del XXVI curso de Estado Mayor de la Defensa. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)
El Rey, en la clausura Del XXVI curso de Estado Mayor de la Defensa. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)

Entre las cosas que la princesa debe llevar se encuentran objetos tan específicos como horquillas y redecilla para el moño cuando acuda a clase. En las maniobras se permite a las mujeres la coleta alta o trenza, dos peinados con los que la Princesa está muy familiarizada. A los caballeros cadetes se les corta el pelo si no lo llevan ya así. Se les entrega pijama, ropa interior y calcetines. En el caso de las mujeres militares, pueden utilizar la propia.

Y como ya adelantó Vanitatis en lo que será este primer día a la dama cadete Borbón, se le entrega como al resto de alumnos todo lo necesario para la vida diaria que necesiten durante el tiempo que permanezca en la academia. También el decálogo del cadete que debe memorizar. En este caso es el mismo que también tuvo que aprender el príncipe Felipe. Seguramente este aspecto ya lo debe tener interiorizado la heredera, igual que otras cuestiones que su padre le habrá transmitido.

placeholder Leonor, junto a los Reyes, el pasado julio en la Academia Militar de Zaragoza. (EFE/Javier Cebollada)
Leonor, junto a los Reyes, el pasado julio en la Academia Militar de Zaragoza. (EFE/Javier Cebollada)

El incumplimiento de una norma por muy leve que sea supone no salir el fin de semana, como le sucedió al príncipe Felipe. Estuvo arrestado con su compañía en varias ocasiones al pillarles a él y a otros compañeros incumpliendo el horario nocturno de entrada en la academia. Para el Jefe del Estado su pesadilla era no despertarse cuando sonaba el pitido mañanero. A pesar de que era estridente, el sueño del caballero cadete era aún más potente. Hasta que no llegó a Zaragoza, el príncipe Felipe no tenía la disciplina que sí ha tenido su hija. Tanto en casa como en su paso por el internado de Gales. La dama cadete Borbón está acostumbrada a cumplir las normas.

Este jueves, 17 de agosto, la heredera al trono se convertirá en la dama cadete Borbón. Nada de Leonor, ni princesa, ni alteza. Tampoco tuvo tratamiento su padre, el rey Felipe, que fue el caballero cadete Borbón. El apellido lo llevará Leonor bordado en la camisa del uniforme que le entregarán el día de su incorporación a la Academia de Zaragoza ya como militar. Esa mañana, la princesa Leonor cambiará la maleta con sus pertenecías más personales por la ropa uniformada y el macuto que la acompañará en las maniobras. También se le hará entrega de un ordenador y de libros para el desarrollo de las clases. La única diferencia con el resto de sus compañeros es que en el caso de la heredera no recibirá los 417 euros que perciben el resto de cadetes, aunque sí tiene acceso a los cajeros de los dos bancos que hay dentro del recinto.

Princesa Leonor
El redactor recomienda