Richard Branson sobrevive (con humor) al huracán Irma en su isla privada
El dueño de Virgin estaba en su isla privada cuando el huracán más grande de la historia ha pasado sobre él. A pesar de lo grave de la situación, su actitud cómica sigue haciendo acto de presencia
La moda de ser propietario de una isla privada está reservada a unos pocos afortunados, pero hay días como estos en los que ser dueño de un trocito de paraíso no es tan apetecible. Si no, que se lo digan al multimillonario propietario de Virgin, Richard Branson, que en los años 70 adquirió la isla Necker al noroeste de las Islas Vírgenes Británicas y que sufren ahora las embestidas del huracán Irma. De hecho, esta amenaza ha pillado al propio empresario en su pedacito de cielo junto a algunos amigos.
Una cuestión que, a pesar de que él se lo ha tomado con optimismo en sus redes sociales, lo cierto es que es preocupante, porque Irma es el mayor huracán de la historia y ha arrasado islas enteras a su paso por el Caribe. Un peligro que ahora se cierne sobre el empresario, que ha mostrado en sus perfiles personales las medidas de seguridad que ha adoptado para protegerse del mal tiempo, por utilizar un término menos alarmista.
Waiting on more info about how else to best support #Irma aid, urge all to donate to @BritishRedCross https://t.co/YcesywntcZ @VMGiving pic.twitter.com/viYG5ZVdJa
— Richard Branson (@richardbranson) 7 de septiembre de 2017
“Nuestra principal preocupación es la seguridad, para todos los que están aquí, para todas las personas en las British Virgin Islands y quienes están en el paso del huracán”, decía alarmado Richard Bradson tanto en su perfil de Twitter como en su blog personal en la página oficial de Virgin, donde ha colgado numerosas instantáneas de cómo están llevando el proceso.
Necker buildings handle extreme weather pretty well, but with a Category 5 hurricane… https://t.co/JxlBC3GRW5 #Irma pic.twitter.com/JLk7urlqT6
— Richard Branson (@richardbranson) 5 de septiembre de 2017
Así, le hemos podido ver durmiendo en grupo en una misma habitación con literas y colchones por el suelo, algo menos glamuroso de lo que tiene acostumbrado. Eso sí, ya ha informado que esta habitación no será la definitiva, dado que se bajará a una bodega de cemento que hay en la planta baja cuando el huracán toque la isla: “Esperando la plena fuerza del huracán Irma en aproximadamente cuatro horas, nos refugiaremos en la bodega de cemento bajo la casa. Conociendo a nuestro increíble equipo como lo conozco, sospecho que quedará muy poco vino cuando podamos volver a salir”, se permitía bromear en un momento de tensión.
Just experienced a night of howling wind and rain as Hurricane #Irma edges ever closer – everyone calm & upbeat https://t.co/tF84SPx7aB pic.twitter.com/lbM0bdHxCv
— Richard Branson (@richardbranson) 6 de septiembre de 2017
Pero es que también está viviendo esta experiencia con cierta curiosidad sobre lo que sucederá y algunas medidas que le divierten, como dormir todos en comuna como si fueran niños: “No había tenido una fiesta de pijamas así desde que era un niño. Extrañamente, es un privilegio el experimentar lo que se está convirtiendo en posiblemente en la tormenta más grande de la historia con un grupo tan genial de gente joven”.
I haven't had a sleepover quite like this since I was a kid. Wonderful team here on Necker all well https://t.co/tF84SPx7aB #Irma pic.twitter.com/DnnfUaeXhd
— Richard Branson (@richardbranson) 6 de septiembre de 2017
La moda de ser propietario de una isla privada está reservada a unos pocos afortunados, pero hay días como estos en los que ser dueño de un trocito de paraíso no es tan apetecible. Si no, que se lo digan al multimillonario propietario de Virgin, Richard Branson, que en los años 70 adquirió la isla Necker al noroeste de las Islas Vírgenes Británicas y que sufren ahora las embestidas del huracán Irma. De hecho, esta amenaza ha pillado al propio empresario en su pedacito de cielo junto a algunos amigos.