Las tres tendencias capilares vistas en la Semana de la Moda de Milán que querrás copiar

¿Recuerdas dónde aparecieron las diademas con estructura? Mucho antes de que todas las marcas de moda, belleza y gigantes de ventas lanzaran su versión de las diademas de espuma, Prada se inventó las diademas más deseadas y replicadas de la historia de la moda. ¿Dónde? En Milán.

Lo mismo ocurría con aquellos ostentosos pasadores dorados llenos de medusas enmarcadas en medallones clásicos… Versace los incorporó a las voluptuosas melenas de raya en medio y raíz tersa. El resultado fue la rápida expansión de las horquillas joyas, desde las doradas hasta las perlas.

Es por ello que cuando sobre la pasarela italiana desfilan peinados y accesorios diferentes a lo visto anteriormente, sabemos que estamos ante las que serán las tendencias de la temporada. Este año, Versace, Fendi y Prada han sido las tres firmas que han sembrado el germen de lo que haremos con nuestro cabello.

Lazadas-medallón, lo más 'sixties' de Milán

Podría decirse que el elemento común entre los tres estilismos más destacados de Milán es que logran un efecto de viaje en el tiempo. Mientras Versace y Prada se inspiran en los siempre favorecedores años 60 con sus toneladas de glamour a lo Jackie O, Fendi opta por un paseo hacia el futuro.

Diademas, horquillas y pasadores vuelven a ser la forma de Versace de incorporar dos de los elementos definitorios de su estética en el cabello. El oro y los medallones con la cabeza de la medusa, emblema de la firma italiana, decoran lazos de un rígido material entre gros-grain y terciopelo, sustituyendo al nudo, de tal forma que el lazo queda plano.

Hecha la joya, solo queda convertirla en una horquilla, adherirla a un pasador o coserla a una diadema de estructura -menos gruesa que las antiguas, eso sí-, de tal modo que se consigue un accesorio capilar de vibes sesenteras. El siguiente paso es sublimar el cabello de tal modo que el lazo se convierta en un accesorio naíf.

Los colores pastel satinados que se repiten en toda la colección se replican en los lazos. Cada prenda tiene su pasador o diadema a juego, de tal modo que el impacto es total. Para conseguir un efecto aún más envolvente, Versace borra del horizonte cualquier melena suelta. En su lugar, vemos semirrecogidos, coletas altas, cardados o melenas middle part. La única excepción sobre la pasarela quizá es el bixie de Iris Law.

Los accesorios de raíz ya están aquí

Con un radical salto temporal, llegamos a otra de las tendencias más originales de la pasarela, el invento de Fendi para reivindicar la importancia de la raíz del pelo. No hay negociaciones, la raya siempre debe estar en el medio. Las diademas de raíz de Balmain o el strass pegado al cabello han logrado que miremos al cuero cabelludo con otros ojos, y si la industria cosmética está enfocada en cuidarlo y arrastrar el skinfication a esta parte del cabello, la moda no se iba a quedar atrás.

En el caso de Fendi, el minimalismo beauty se ha materializado en una geométrica y estrecha línea blanca que recorre la raya del pelo hasta la misma frente, adentrándose, incluso, un centímetro sobre ella. La combinación de un cabello muy pulido y terso, que podría parecer incluso aburrido, con una línea blanca logra iluminar el peinado.

El efecto es el de una cabeza geométricamente equidistante, como si se tratara de un lienzo impoluto. Al peinado, se le suma un maquillaje muy natural, con las cejas enmarcadas y un tono rosa muy sutil en los labios. De este modo, la colección, que se apoyaba en diseños color block geométricos, tenía su reflejo en el cabello. Queda así instaurado que el efecto mojado es la textura capilar más elegante, solo hay que aderezarla con el ‘menos es más’. Sin accesorios barrocos ni Y2K, solo una línea blanca con la que destacar la raya central.

Las nuevas diademas de Prada

Y ahora volvemos otra vez a los años 60. Visualiza aquellas diademas de algodón que las mujeres anudaban en la nuca y con las que sometían a todo el cabello a una tensión con la que se alisaba y despejaba el cabello. Las diademas de Jackie Kennedy o la reina Sofía, antaño blancas y casi de paño, han sido revisitadas por Prada.

Puede que Miuccia, visto el éxito mundial de sus diademas de estructura, haya encontrado un filón en el mundo de los accesorios capilares, pero lo cierto es que las diademas negras de nylon ya llevan un tiempo haciendo un ruido entre las it girls. Bella Hadid o Hailey Bieber son algunas de sus defensoras a ultranza al incorporarlas en sus looks 'casual'.

En el caso de Prada, sobre la pasarela italiana la propuesta es una fusión de la bandana sesentera y la cinta lifting noventera. Elaboradas con un material entre la espuma y el nylon, y superando considerablemente la anchura de sus predecesoras, las nuevas diademas de Prada se anudan en la nuca y aprisionan tanto el cabello como las orejas.

El volumen de la cabeza queda reducido y, aquí viene su gracia, se liberan de forma estratégica algunos mechones frontales que jugarán a ser un improvisado flequillo. Para lograrlo, el cabello se texturiza, hasta lograr un efecto entre greasy y wet. Así, el cabello se borra de la ecuación, dejando que todo el protagonismo sea para el rostro. En el caso de la forma italiana, las sombras de ojos cremosas en tono melocotón se convertían en un auténtico faro.

Teniendo en cuenta que todas ellas son tendencias que tienen como foco temporal la primavera y el verano (más bien este último), queda claro que solo hay dos opciones: o sublimas tu cabello con un volumen Versace, o reduces su presencia en pro de la comodidad frente a las altas temperaturas como Prada y Fendi. Pero, hagas lo que hagas, prepárate para un viaje temporal.