Manual de estilo para utilizar un cárdigan (sin parecer tu abuelo)
Puede parecer una prenda del pasado y no lo es. Hasta los 'swaggers' la han convertido en su prenda fetiche. Aquí algunas razones para tener uno y combinarlo con mucha solvencia
El cárdigan ha dejado de oler a naftalina, que sus bolsillos oculten algo más que los caramelos Werther's Original y que, en definitiva, sea una pieza usada por los abuelos. A estas alturas del siglo XXI, hasta la tribu urbana 'swagger' la ha convertido en su prenda fetiche para el otoño-invierno. La chaqueta de punto –también conocida como rebeca– ha dejado de ser una prenda rancia. Ahora es posible llevarla de forma desenfadada; para lucirla con corbata o sin ella, con camiseta o no.
Su versatilidad seducirá a quienes todavía recelan de su uso. Para convertirla en un símbolo más propio de treintañeros que de sesentones ya que se convierte en el broche perfecto a estilismos más o menos formales. Las hay en infinidad de formas: con cuello de chal, con el patrón propio de una americana, con bolsillos delanteros, acanaladas... Aquí, una aproximación al uso del cárdigan durante esta temporada.
1. Adiós a la camisa formal
El cárdigan permite y exige un uso 'casual'. Cabe la opción de desterrar la camisa a un segundo plano para combinarlo con un pantalón 'cropped' y unas zapatillas en tonos oscuros. Una opción perfecta para una mañana de domingo o, por qué no, para llevarlo a la oficina en un viernes 'casual'. Y llevarlo abrochado o sin abrochar.
1. Mochila de COS (99 euros); 2. Camiseta azul marino con inicial bordada personalizada de Anclademar (35 euros); 3. Pantalón slim fit de Mango (39,99 euros); 4. Cárdigan de lana, seda y cashmere de Massimo Dutti (49,95 euros); 5. Zapatilla modelo Campus de Adidas Originals (109,95 euros).
2. Los colores del otoño
Tostados, verdes o azules son, sin duda, los colores que marcarán tendencia esta temporada. Agitar estas tonalidades y optar por la mezcla perfecta se resuelve en este conjunto con aires propios de los años 70 del siglo pasado. Que no falten unas botas Chelsea o unas gafas de acetato con apariencia de carey. Un conjunto apto para el gentleman contemporáneo.
1. Cárdigan de lana de J.Crew (121 euros); 2. Pantalón chino modelo slim de Zara (19,95 euros); 3. Gafa de acetato de Gucci (280 euros); 4. Camisa modelo Sport Ciudad Oxford de Mirto (79 euros); 5. Botín de serraje marrón de Zara (59,95 euros).
3. Buenas migas
Lana y vaquero. Los secretos de alcoba de este matrimonio tan bien avenido resultan innumerables. Hasta tal punto que tanto el cárdigan como el pantalón denim flirtean con elementos como las zapatillas blancas o la riñonera –complemento estrella de esta temporada–. Así se resuelve un look tan clásico como atemporal.
1. Camiseta modelo Join Life de Zara (7,95 euros); 2. Cárdigan modelo The Merino de The Brubaker (65 euros); 3. Pantalón modelo 511 de Levi's (c.p.v.); 4. Riñonera modelo GG Supreme de Gucci (590 euros); 5. Reloj modelo La Vedette de Cluse (c.p.v.); 6. Zapatilla modelo Court Royale de Nike (55 euros).
4. Blazer parece...
...cárdigan, en definitiva, es. Con una chaqueta de punto como esta, a medio camino entre el estilo marinero y el preppy, es posible restarle formalismo a través de una camiseta estampada o un polo clásico. La nota distintiva la ponen los complementos.
1. Reloj modelo On Full Guard Touchscreen Smartwatch de Diesel (c.p.v.); 2. Chaqueta modelo Milano de Scalpers (90 euros); 3. Pantalón chino modelo John de Edmmond (98 euros); 4. Camiseta de Acne Studios (64 euros), disponible en Yoox.com; 5. Zapatilla modelo Endliner de Lacoste (116 euros).
¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas nuestros consejos sobre moda, belleza y estilo de vida. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.
El cárdigan ha dejado de oler a naftalina, que sus bolsillos oculten algo más que los caramelos Werther's Original y que, en definitiva, sea una pieza usada por los abuelos. A estas alturas del siglo XXI, hasta la tribu urbana 'swagger' la ha convertido en su prenda fetiche para el otoño-invierno. La chaqueta de punto –también conocida como rebeca– ha dejado de ser una prenda rancia. Ahora es posible llevarla de forma desenfadada; para lucirla con corbata o sin ella, con camiseta o no.