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Desfilar como las supermodelos vuelve a estar de moda
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STRIKE A POSE

Desfilar como las supermodelos vuelve a estar de moda

Los desfiles de la Semana de la Moda de Nueva York reviven la forma de desfilar de las modelos de los años 90

Foto: Tres tops de Versace en 2017. (EFE)
Tres tops de Versace en 2017. (EFE)

¿Recuerdas cómo caminaban las supermodelos en los años 90 por la pasarela? Las tops recorrían el camino convertidas en auténticas tigresas cuya mirada felina y sus zancadas -porque lo eran- imposibles hacían temblar a los fotógrafos que tras la pasarela esperaban fotografiar a las estrellas de la moda. Tras la era de las supermodelos, las marcas prefirieron que fueran sus diseños, y no las mujeres que los lucían, los que se hicieran con todas las miradas, por lo que las modelos dejaron de andar con esa actitud de 'la pasarela es mía' y bajaron el ritmo, la fuerza y la mirada. El que las rotundas siluetas perdieran centímetros a pasos agigantados hizo que su forma de andar cambiara y que la actitud se rebajara. ¿Recuerdas ese capítulo de ‘Sexo en Nueva York’ en el que Carrie Bradshaw es invitada a desfilar junto a supermodelos y lo hace como si se encontrara en la pasarela de Versace de los 90, girando dos veces a lo largo del camino y mirando desafiante a los fotógrafos?

Esa es la actitud que esta temporada regresa a algunas pasarelas de la mano de firmas que han querido retomar esa forma de andar y actuar tan empoderadoras (¿a que hacía mucho que no decíamos esta palabrita?), no sin cierto tono jocoso, para devolver a la moda ese poderío noventero que comenzó a imponerse de nuevo cuando modelos como Gigi Hadid y Kendall Jenner devolvieron los nombres -y ahora los followers, claro- a las pasarelas.

Por supuesto, ha sido Irina Shayk una de las modelos que mejor ha sabido traer esa fuerza a los desfiles de la mano de Brandon Maxwell, que ha visto en la silueta de la modelo un reflejo de las curvas de los 90. Al fin y al cabo, él fue el diseñador que ideó esa entrada triunfal de Lady Gaga en la gala MET, haciendo que cualquier deseo de pasar desapercibida, aunque somos conscientes de que la cantante y actriz desconoce el significado de esa palabra, quedara anulado.

La modelo Elsa Hosk ha sido la más aclamada del desfile de LaQuan Smith, que ha abierto y en el que ha presumido de un andar inigualable enfundada en un vestido transparente de leopardo combinado con accesorios de estética cowboy.

placeholder Christian Siriano. (Getty)
Christian Siriano. (Getty)

Christian Siriano ha llevado esta nueva moda un paso más allá dotando a su desfile de una teatralidad exacerbada dispuesta a despertar en los asistentes una sonrisa, pero sobre todo a dar el pistoletazo de salida a una forma de recorrer la pasarela repleta de actitud.

¿Recuerdas cómo caminaban las supermodelos en los años 90 por la pasarela? Las tops recorrían el camino convertidas en auténticas tigresas cuya mirada felina y sus zancadas -porque lo eran- imposibles hacían temblar a los fotógrafos que tras la pasarela esperaban fotografiar a las estrellas de la moda. Tras la era de las supermodelos, las marcas prefirieron que fueran sus diseños, y no las mujeres que los lucían, los que se hicieran con todas las miradas, por lo que las modelos dejaron de andar con esa actitud de 'la pasarela es mía' y bajaron el ritmo, la fuerza y la mirada. El que las rotundas siluetas perdieran centímetros a pasos agigantados hizo que su forma de andar cambiara y que la actitud se rebajara. ¿Recuerdas ese capítulo de ‘Sexo en Nueva York’ en el que Carrie Bradshaw es invitada a desfilar junto a supermodelos y lo hace como si se encontrara en la pasarela de Versace de los 90, girando dos veces a lo largo del camino y mirando desafiante a los fotógrafos?

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