¿Cómo combinar colores y acertar?

Aunque no lo parezca, son los colores los que más quebraderos de cabeza suelen ocasionar cuando nos plantamos enfrente del armario, dispuestas a crear un estilismo único y no somos capaces de conseguir cierta sintonía entre las tonalidades de las distintas prendas. Para conseguirlo, solo hay que tener en cuenta una serie de normas estilísticas no escritas que han ido adquiriendo mayor importancia con el paso del tiempo, gracias, en parte, a la llegada de unas determinadas tendencias u otras.

No en vano, más allá de los dogmas que imperan en el mundo de la moda, la clave está en atreverse, que es precisamente lo que hacen las insiders y expertas en moda y por lo que consiguen ser auténticos referentes de estilo. Construir looks arriesgados con estampados únicos y mezclas de colores originales dignos de fashionista está al alcance de tu mano y para ayudarte en este proceso, te damos cuatro ideas para combinar colores y acertar que hemos fichado a varias prescriptoras.

Blanco, negro o denim

Si vas a adentrarte en esto del color y, por primera vez, vas a salir de los tonos neutros, quizá la mejor forma de hacerlo sea de manera progresiva. En este sentido, decántate por clásicos infalibles como el blanco, el negro o el denim, que pegan con absolutamente todo y son sinónimo de éxito, independientemente de las prendas que lleves y la ocasión para la que luzcas determinado outfit. Nosotras te aconsejamos el blanco para planes de día, y el negro, resérvalo para la noche.

En cuanto al denim, la fórmula más utilizada por expertas y gente de a pie son los clásicos pantalones vaqueros a los que podemos incluir cualquier camiseta, blusa o chaqueta de vibrante color y jugar con los accesorios y complementos. En una versión distinta y por la que optan con más frecuencia las influencers de 40 en adelante, podemos darle una vuelta de tuerca y elegir una camisa vaquera u otra parte superior de mezclilla que llevemos con una colorida falda o unos sastre en tonos pastel.

Color block

En un punto completamente opuesto al anterior, nos encontramos ante el color block que, precisamente, es una tendencia que se basa en la contraposición de colores. Para hacer un look en clave color block perfecto solo tenemos que tener a mano la clásica paleta cromática y elegir prendas cuya tonalidad se sitúe en el lado contrario con la de aquella que vayamos a combinar. Ejemplos muy comunes son el rojo y el azul, el morado y el naranja, el verde y el rosa...

Se trata de una corriente estilística que podemos aplicar en nuestros atuendos para el día a día, pero también en eventos festivos porque, de hecho, es en los looks de invitada donde más podemos verla, ya que se suele partir de un vestido o un traje chaqueta monocolor y añadir la nota opuesta a través de los zapatos y los complementos.

Sin miedo

Como comentábamos al principio, la clave para combinar colores y acertar es atreverse, y esto lo sabe muy bien la influencer Anita Matamoros, que, durante su último año en Milán, ha optado por pasear por las calles de la ciudad italiana con outfits que pasan de todo menos desapercibidos. Personalidad, estilo y originalidad son algunas de las palabras que definen cada uno de sus atuendos en los que el color es protagonista y la máxima es, sencillamente, no combinar.

A veces en color block, otras veces con tonalidades similares... Anita luce estilismos de todo tipo, siempre y cuando, estén formados por colores llamativos, repletos de optimismo. Para esto, solo tienes que fichar algunas de los diseños más coloridos de tu armario y combinarlos de la manera en que te plazca hasta que te sientas a gusto contigo misma.

Monocromáticos

Lejos de todo lo dicho anteriormente, si eres de esas personas a las que no les gusta romperse la cabeza pensando en qué ponerse, apuesta por el color, pero de la manera más sencilla: eligiendo solo uno. Crear looks monocolores es una forma estilosa y sofisticada de no llevar siempre lo mismo, al tiempo que no implica esfuerzo, tiempo, ni grandes conocimientos en moda; lo único necesario es, obviamente, tener todas las prendas de ese color, de la cabeza a los pies.

Una opción que a nosotras particularmente nos encanta es llevar un estilismo monocolor, pero cuyos elementos que lo formen difieran ligeramente en el tono. De esta manera podemos llevar un vestido en verde trébol con sobrecamisa que tienda al caqui, accesorios en color turquesa y bolso en un verde mucho más oscuro. En definitiva, combinar colores y acertar es cuestión de decir 'sí' a todo.