Carolina de Mónaco, Carole Bouquet y sus looks de concierto con Carlota Casiraghi

La relación entre Carolina de Mónaco y Carole Bouquet es legendaria. Son íntimas, consuegras y fans de Chanel. Podríamos pensar que ahora que el tema se afianzó con el matrimonio de sus hijos, la conexión se había visto afectada, pero no es su caso. Su amistad no ha sufrido un ápice. No son muchas las ocasiones en las que podemos ver juntas a la princesa y a la actriz. Ayer por la noche fue una de esas pocas ocasiones en la celebración de la gala por los 60 años de la fundación AMADE en la Ópera de Montecarlo.

Junto a Carlota Casiraghi y a Dimitri Rassam posaron vestidas de la firma de la que la nuera de Carole es embajadora desde hace un tiempo. La misma a la que dos de las mujeres con más estilo a nivel internacional están vinculadas por su gran amistad con el diseñador Karl Lagerfeld. El cariño que unía al Káiser con la familia real de Mónaco sigue más presente que nunca en la maison. Pero eso ha sido extensible al caso de Carole Bouquet, que fue durante años imagen del perfume más popular e incombustible de la firma, Chanel Nº 5.

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Paula Mata

“Carlota representa el estilo de Chanel de una forma muy auténtica y natural, sin dejar de ser jamás fiel a su propio universo”, ha asegurado la directora creativa de la marca francesa, Virginie Viard, en un comunicado en el que no faltan las palabras de Carlota, que habla de su vinculación con la diseñadora. “Virginie me conoce desde que era una niña, por lo que tenemos una complicidad natural que no necesita ser explicada”, ha afirmado. “Cuando descubrí la colección, encontré prendas que llevaría cada día de mi vida y con las que realmente me siento muy cómoda. Es importante ser capaz de poder elegir para expresar algo diferente acorde a cada momento”, sentenciaron en 2022 cuando Carlota fue imagen de su colección otoño-invierno.

Ayer noche llevaba un vestido de seda estampado de la colección primavera-verano 2023, con un bolso bandolera de piel negro y cadena dorada, un clásico de la enseña. Este formaba parte del look del desfile que fue un nuevo paso de Chanel hacia el armario de las nuevas generaciones. Prueba de ello son los diseños de punto de minifalda con jersey crop con flores naíf y el logo de la marca, pues Virginie Viard sabe que la generación Z y los millennials aman la logomanía y apuestan por creaciones de las grandes marcas en las que el logo viene a justificar el precio pagado.

En esta ocasión, Carlota prescindió de los mitones negros que lució la modelo en la presentación oficial del outfit y también adaptó a su estilo el maquillaje con una sombra nacarada y un color de labios que epataba con el dibujo que estampaba el vestido.

Carolina hizo una apuesta por un vestido de encaje azul con reflejos metalizados, clutch rígido en el mismo color y se recogió la melena. Carole, por su parte, con una chaqueta de tweed en tonos rosas y rojos de la mítica de la firma francesa sobre una falda de tafetán negra con volantes. Y accesorios también firmados por la maison, entre los que destacaban unos zapatos de tacón sensato con puntera negra y tela de tweed.

Una oda al Chanel de siempre.