Rocío Osorno: "En Instagram tienes que tener personalidad para que te vaya bien"

Rocío Osorno (1987) reconoce que la moda ocupa el 90% de su día: "Entre mi perfil en redes sociales y mi marca, la moda está muy presente en mi vida". En cifras, la influencer cuenta con 1,6 millones de seguidores en Instagram y lidera una empresa más que solvente, una firma que lleva su nombre y que cada temporada viste a novias e invitadas de boda. Se entiende, por tanto, que esté nominada a un premio Ídolo.

Para los que desconozcan de qué premios hablamos, son los galardones por y para los influencers impulsados por una de ellos, Aida Doménech, Dulceida. "Nacieron en 2021 con el propósito de reconocer el talento y a una industria emergente, que ha cambiado para siempre las reglas del juego", explican desde la organización. Este 14 de marzo celebran su tercera edición en Madrid, en el teatro Príncipe Pío, y se espera un gran desfile con figuras del universo digital. Rocío Osorno compite en la categoría de moda contra By Calitos, Clakovi y Carlota Marañón. Coincidiendo con esta nominación, Vanitatis ha hablado con la sevillana sobre su profesión, su día a día y su fondo de armario.

"Me ha hecho mucha ilusión que se reconozca el trabajo de tantos años, es motivador", confiesa sobre esta nominación. Aunque podríamos pensar que el paso lógico es que alguien sea influencer y gracias a eso pueda crear su firma de moda, el caso de Rocío Osorno fue justo al revés. La sevillana estudió Ingeniería Técnica Agrícola y se fue con una beca Erasmus a París. Allí se dio cuenta de algo que en realidad siempre había sabido: su vocación por la moda. De ahí que se matriculase en un grado de Patronaje Industrial y Moda, unos estudios que compaginó con sus inicios en redes sociales. "Empecé con la ilusión de un proyecto de diseño de moda, que es lo que me apasiona realmente".

La moda como motor de su vida, de su actividad diaria en Instagram y de su trabajo como diseñadora y empresaria: "La moda está muy presente en mi vida, aunque no me dejo estrictamente guiar por las tendencias porque soy muy libre, con un estilo muy definido. Ahora es todo muy moderno y yo sigo en mi esencia, con mi punto neutral entre lo clásico y lo moderno. Supongo que por eso mi perfil funciona, porque llego a muchos públicos".

Con los pies en la tierra y el mismo círculo familiar y de amistades de siempre, a diferencia de otras, Osorno sí que se identifica con el término influencer. "Estuve bastante tiempo que no asumía el momento de decir influencer porque al principio la gente te decía '¿qué?', pero a día de hoy, que está tan normalizado, me es indiferente. Lo he asumido, soy influencer y me dedico a las redes sociales", dice rotunda.

En esta aventura a dos bandas, medio influencer, medio diseñadora, la sevillana no está sola: "Tengo un equipo muy cercano, muy familiar, sobre todo mi hermano, que es mi mano derecha en la empresa. Además de mi hermano, mi madre. Son las personas que han hecho que pueda generar tanto contenido porque me ayudan con las fotos, van conmigo a la localización, están cuando me cambio, me maquillo… Luego tengo mi agencia, GO., que me ayuda con las negociaciones, colaboraciones y el día a día de publicidades. Y para terminar, el equipo de las costureras y del taller que me ayudan con la marca".

Su día a día se desarrolla entre grabaciones, fotos, retoques en el taller y su rol como madre de dos hijos: "Soy consciente de que sacrifico tiempo, que no va a volver, y muchos días es demasiado. Horas en el móvil, con la cámara, con el ordenador, y luego cuando me doy cuenta paso menos tiempo del que me gustaría con los niños, porque estoy pendiente del móvil y no es tiempo de calidad. Intento organizarme. Los viernes, por ejemplo, dejo todo el contenido organizado y, como llegan antes del cole, me dedico a estar con ellos, hacemos palomitas y vemos una peli, ahí estoy desconectada y disfrutando de verdad".

En este sentido, Rocío Osorno se siente esclava de su profesión, del hecho de estar 24 horas conectada. "A todas las profesiones les dedicas más o menos tiempo de tu vida, pero a lo mejor llegas a casa y desconectas hasta el día siguiente. Lo mismo con las vacaciones, desconectas y descansas; sin embargo, en mi caso es pleno agosto y sigo publicando un post al día y stories. Hay veces que ya no sé qué subir, que no haya subido ya. Tengo un perfil que hago un mix de vida, de lo que me va pasando, y me siento colapsada ante qué subir. No hay día de descanso. Si me voy mañana una semana de vacaciones, voy a seguir publicando igual. Nunca llegas a desconectar del todo y mentalmente satura".

Con todo y con eso, es innegable que la sevillana es una de las influencers más seguidas y perseguidas en nuestro país. ¿El secreto de su éxito? "Soy una persona muy trabajadora, muy constante y me lo he currado. Empecé de las primeras cuando no había nada y no se sabía si esto iba a llegar a alguna parte. La clave es la constancia, el ser tan estricta, renovándose, irse adaptando, tomar ideas… Instagram ha cambiado mucho desde que empezó. Hay que ir adaptándose y siendo creativa, yo siempre lo digo. En moda tienes que tener personalidad para que te vaya bien. Si vas a la copia o a la inspiración, eso no funciona, tienes que tener algo de esencia tuya".

Define su estilo entre clásico y moderno, y en sus looks, busca huir de las tendencias: "Soy más libre gracias a que, precisamente, tengo un estilo definido. Aunque lo que subo es más enfocado a invitada, fiesta y eventos, en mi día a día visto cómoda. Me gusta ir en vaqueros, zapatillas de deporte New Balance y una bomber. Apuntando a accesorios, me he viciado a llevar muchos anillos mezclados de Pandora".

Años y años de looks, y algunos de los que se arrepiente. "Tengo una personalidad que, aunque tenga un estilo muy definido, siempre suelo ir cambiando, madurando. Luego, cuando miro hacia atrás, pienso: '¿Cómo fui así a tal sitio?', pero tampoco me parece un horror. No arriesgo hasta ese extremo".

Con el tiempo también ha logrado compaginar esos dos mundos de los que vive y trabaja, el de influencer y el de diseñadora: "He estado mucho tiempo intentando separar uno de otro, porque quería fomentar mi perfil de moda, independientemente del diseño, pero creo que ambos van de la mano. Saco pinceladas en redes de vez en cuando de la parte de diseño y de creación, eso interesa mucho a mis seguidores. Hago un mix que funciona y que me gusta, son de los contenidos que más éxito tienen en mi perfil".

Fieles que, como hemos señalado al principio, ya suman 1,6 millones. "Lo mejor que tienen las redes es la ayuda y el feedback que recibo de todo. Por suerte no tengo apenas haters, lo malo son opiniones y comentarios aislados, y en general, la gente es muy amable, siempre que tengo cualquier problema, cualquier duda, les pregunto. Al segundo tengo respuestas por todo y eso es de valorar". En algo menos de 48 horas descubriremos si Rocío Osorno se alza con el premio Ídolo, un galardón que seguro compartirá con sus followers.