Ya hemos visto 'Las Berrocal': pasado, humor, colofón marroquí y otras sorpresas (sin spoilers)

Si viendo la promo de 'Las Berrocal' a alguien le vino a la cabeza que el formato, o incluso ellas mismas, recordaban a las Kardashian, que sepan que no son los únicos que han pensado lo mismo. Nada más empezar el primer capítulo de este docureality, que nos lleva a conocer mucho más de las tres mujeres que rodean a Vicky Martín Berrocal (su hija Alba, su hermana Rocío y su madre, Victoria), alguien le dice a la diseñadora que "se parece Kim".

Es una buena forma de romper el hielo de esta producción que Movistar Plus + estrena el próximo día 20 y que este mismo lunes despliega sus alas en forma de junket. Formalmente, 'Las Berrocal' puede recordar a otros formatos similares, pero el contenido es lo que la diferencia. Los creadores lo saben, y por eso se preocupan, desde el principio (y voz en off mediante) de situar en el mapa a Vicky Martín Berrocal. ¿Sabemos quién es realmente?

Algunos datos sobre ella, repasados por la producción, lo dejan claro. Una de sus batas de cola la llevó la mismísima Uma Thurman y hasta Pedro Almodóvar se enamoró de sus modelos flamencos. No solo eso: su podcast ha ganado un Ondas y es uno de los más escuchados en nuestro país.

Por supuesto, no se obvian sus inicios en el proceloso universo de la fama: su boda con Manuel Díaz, el 'Cordobés', a finales de los 90 (se ven incluso imágenes de archivo de aquel enlace que paralizó la prensa del corazón) o el momento en el que, como bien dicen las integrantes del podcast 'Estirando el chicle' durante un momento del segundo episodio, solo era un personaje de la prensa rosa.

La evolución de Vicky Martín Berrocal es un punto crucial del reality para acercarse a ella por primera vez. Para los más apócrifos, 'Las Berrocal' sitúa a la diseñadora y le da el protagonismo de esa voz en off que sirve de guía y camino; que presenta a su hija Alba, de sobra conocida en el mundo influencer, o a las más desconocidas Rocío y Victoria, esa hermana y esa madre que seguramente merecerían un reality por sí mismas. Mujeres sin necesidad de hombres que las acompañen, aunque estos surjan de vez en cuando en sus charlas de mesa y café.

Tras ver los 4 capítulos esto es, punto por punto, lo que más nos ha llamado la atención de este docureality que Movistar Plus + emitirá semanalmente a partir del día 20 de mayo.

- La apertura de una tienda, el hilo conductor

Como todo docureality, hay un hilo conductor que conecta un episodio con otro. En este caso, la apertura de una tienda de la firma de Vicky (Victoria) en la madrileña calle Velázquez y el regreso de ella al mundo de la moda, que siguiendo la narrativa de estas producciones, sirve como colofón final.

A lo largo de los cuatro capítulos podemos ver que Vicky no se anda con paños calientes. Ejemplos hay a montones: desde cómo puntualiza que no quiere que se vean unas cajas en el escaparate de su tienda a cómo comunica al costurero, de manera segura y asertiva, que no está muy feliz con un modelo en concreto.

Para los que buscan salseo, la preparación de la tienda deja ante las cámaras algún rifirrafe entre ella y Alba. Cuando Vicky le reprocha a la joven que no la escuche, un pequeño roce entre madre e hija las humaniza y las baja a la tierra. Las trifulcas son algo común incluso en las mejores casas. "No digas que no te escucho. Si no te escuchase no estaría hoy tan cuerda", reprocha Alba.

En las entrevistas a cámara, Vicky también deja perlas sobre cómo ha lidiado con la personalidad de su retoño. "Ha habido momentos en mi vida en los que yo he suplicado: '¡Manuel (Díaz, el 'Cordobés') llévatela".

- El padre ausente con otra familia

La presencia de José Luis, patriarca de la familia fallecido en 2008, es contínua a lo largo de los cuatro capítulos. Impacta saber cómo Victoria, su mujer, descubrió que había sufrido un derrame que le acabó provocando la muerte. También hay información de cómo convivió con sus infidelidades y qué supuso el chocante descubrimiento de su bigamia. Una cena de las cuatro mujeres sirve para escenificar ese tipo de secretos familiares ("¿tú sabes que José Luis tiene una niña?", dice Victoria)

En el cuarto capítulo, que tiene lugar, casi en su totalidad, en Marrakech, una frase de la abuela sobre las mujeres ("son más listas para engañar que los hombres") prrovoca la confrontación de su nieta y saca a relucir viejos fantasmas familiares que estas mujeres parecen resolver con el arma de la comunicación. "No puedes ir pensando que lo que tú has vivido y has aceptado es lo correcto", le dice.

- Rocío y sus citas

Si hay alguien que supone todo un descubrimiento en el reality es la hermana pequeña, la inefable Rocío. Experimentados en productos similares, es regla de oro que siempre aparezcan 'secundarios' que acaban robando el foco a los protagonistas. Rocío parece ser uno de esos 'actores de reparto' que disputa el papel principal.

Durante los cuatro capítulos podemos ver desde cómo su sobrina y un amigo elaboran para ella un perfil de Tinder con el objetivo de encontrar pareja (el amor y el desamor son temas que surgen contínuamente) a su miedo a las serpientes durante el viaje a Marrakech. Una fobia que deja ese tipo de momentos de humor físico que no pueden faltar en todo buen reality. "Yo no entro a la plaza donde están las bichas esas", afirma ante las cámaras.

- El sentimiento de abandono

Otra de las grandes sorpresas tiene que ver con el sentimiento de abandono de dos personas en concreto: Alba y Rocío. Ni los más avezados lectores de revistas sabrán que la hermana pequeña de Vicky Martín Berrocal vivió durante una larga temporada con el guardés y su familia (hay un reencuentro al respecto que supone uno de los momentos más emotivos del tercer capítulo) cuando solo era una niña. "Yo me sentía abandonada", llega a decir, sin culpabilizar a su madre, asegurando que esta "no lo hizo a malas". "Estaba muy pendiente de mi padre", añade.

Sin culpas ni deudas pendientes, Alba también deja caer la misma sensación, provocada por una madre excesivamente preocupada por el trabajo.

- Los secretos de una abuela

A sus 78 años, Victoria es otro de los 'guilty pleasures' de la producción. Verla disfrutar del viaje a Marrakech o comprobar que es más valiente que sus hijas y su nieta a la hora de afrontar retos ("Sois unas cagonas", les dice poco antes de enfrentarse a una aventura) es uno de los plus de la producción. Generacionalmente, la forma de afrontar la vida de la madre de Vicky y Rocío, desde sus idas y venidas a su casa de El Rocío al recuerdo de su difunto marido, conectará con la parte más veterana de la audiencia.

- Un colofón marroquí

Sin desvelar demasiados detalles, y siguiendo la narrativa de toda ficción que se precie, 'Las Berrocal' va trabajando un clímax que, en este caso, se produce con un viaje conjunto de las cuatro protagonistas a Marruecos. Y no, no esperen 'Sexo en Nueva York 2' (aunque alguna confesión sexual se deja caer por el camino) y aquel viaje hortera de Carrie y compañía a Abu Dabi.

Si el resto de los capítulos intercala las historias de las cuatro mujeres (Alba y su novio, Rocío y sus entrenamientos, la abuela Victoria y su pandilla de amigas...) con el uso de entrevistas a cámara y montaje paralelo cuando cada una de ellas está en un emplazamiento diferente, el cuarto las une en unas vacaciones que son una mezcla de aventura física y desenfado verbal. Un momento de esparcimiento que permite al espectador conocerlas mucho mejor.

Pero, para no destripar demasiado el desenlace ni todos los contenidos de un formato que mezcla realidad, emotividad y humor, diremos que lo mejor siempre es verlo sin prejuicios. La mejor forma de descubrir a Vicky y compañía será estar atento a Movistar Plus + a partir del próximo 20 de mayo.