Por qué Imanol Arias no puede 'matar' a Antonio Alcántara

Conmoción entre los fans de 'Cuéntame'. El mítico personaje de Antonio Alcántara, interpretado por Imanol Arias durante dos décadas, ha fallecido en el último capítulo emitido por Televisión Española. El actor ya había dado pistas de que esto podía pasar en una reciente entrevista con la agencia EFE, a cuenta de su regreso al teatro con 'El coronel no tiene quien le escriba'. "No voy a hacer televisión toda la vida", avisó el intérprete a principios de mayo. Parece que, ahora que ha vuelto a pisar las tablas, ese será su destino profesional. "Yo empecé en el teatro y, ahora que he vuelto, quiero seguir en ello". Aunque su muerte tiene truco porque seguirá grabando la serie con normalidad.

Su muerte 'futura' es uno de los juegos de tiempo con el que la serie ha trufado esta nueva temporada. Pero sí es un 'cambio' profesional que coincide con otro gran cambio en su vida personal. Acaba de conocerse que Arias y su esposa, Irene Meritxell, llevan meses separados. El intérprete charló con Vanitatis después de hacerse pública la ruptura y entonces dio unas enigmáticas declaraciones que bien podrían aplicarse ahora a ese adiós al personaje que tantas alegrías le ha dado, aunque sea un adiós no definitivo: “Yo tengo muy buen recuerdo siempre, ya que para mí el pasado es algo que no me crea conflicto. Mi vida no me permite quedarme anclado, ni en lo que fuimos ni en lo que pudo ser”.

Arias no puede permitise 'matar' a Antonio Alcántara, cuando tiene una gran espada de Damocles oscilando sobre sus finanzas. El actor y su compañera de reparto, Ana Duato, tienen pendiente de señalamiento el juicio por el caso Nummaria. En marzo de 2020, la Abogacía del Estado, que representa a la Agencia Tributaria, pidió 28 años de cárcel para Duato y otros tantos para Arias por fraude entre 2009 y 2015, y multas que suman unos 16 millones. El mismo mes, la Fiscalía Anticorrupción de la Audiencia Nacional elevó a 32 los años de prisión para Duato y 27 para Arias. A los actores que interpretan a Merche y Antonio se les acusa de formar parte de una trama dedicada a evadir impuestos a través del despacho de abogados Nummaria.

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Imanol Arias ha hablado en alguna ocasión de este asunto. Ha dicho que se sentía responsable y que pagaría hasta el último céntimo que fuera necesario. De hecho, en estos años ha puesto en venta buena parte de su patrimonio, aunque sigue teniendo las espaldas anchas para afrontar este cambio económico y vital en su vida. Su 'fortuna' tras años de trabajo en el cine y la televisión se resumía en 2017 en dos pisos, dos locales, una mansión en Zahara de los Atunes y cinco plazas de garaje en Madrid, además de una finca virgen junto a otra edificada dentro de una urbanización de lujo en Marbella, todo a nombre de dos de sus sociedades.

Cuatro años más tarde, y con el juicio aún a espera de fecha, ha logrado deshacerse de un piso en el centro de la capital de 45 metros cuadrados y uno de los terrenos anexos de Marbella, en el que tenía construido el chalé. Además, logró vender el chalé de casi 500 metros cuadrados y 2.200 de parcela con unas vistas inigualables y situado en la urbanización Atlanterra de Zahara, en Cádiz. Arias había comprado esta casa, valorada en 1,8 millones según la tasación bancaria, en el año 2001 a través de la sociedad Unaine S.L.

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Imanol tiene tres empresas a su nombre. Dos de ellas, Unaine SL y Línea Sur Producciones SL, las constituyó en 1988 junto a Pastora Vega, que entonces era su mujer. A nombre de la primera posee dos locales y dos plazas de garaje en Madrid. A nombre de la segunda ya no queda nada. Y ninguna de las dos parece tener actividad desde hace años, en concreto desde 2017 y 2018 respectivamente. También cuenta con 11 T’AI Creaciones SL, constituida en 2010 y dedicada, igual que las dos anteriores, a la producción cinematográfica y de vídeo.

La 'muerte' de Antonio Alcántara coincide con un momento vital y a la vez muy complicado para Imanol Arias, un símbolo y un tiempo de comienzos y de cerrar etapas.