Es noticia
Menú
El psicólogo Alberto Soler explica por qué nunca debes obligar a un niño a dar un beso (aunque parezca maleducado)
  1. Vida saludable
Educación positiva

El psicólogo Alberto Soler explica por qué nunca debes obligar a un niño a dar un beso (aunque parezca maleducado)

Pese al convencionalismo social y al miedo a que tu hijo parezca un maleducado, hay razones poderosas para no obligar a los niños a dar besos si no quieren. Conócelas

Foto: Imagen: iStock-VA Diseño.
Imagen: iStock-VA Diseño.
Más información

Este experto en crianza y padre de tres hijos nos explica por qué no es una buena idea obligar a dar besos o abrazos a nuestros hijos. Aunque muchos se preguntan si no es un símbolo de buena educación, Soler apunta que es “un convencionalismo social que se aplica en algunos países”. Explica que hay lugares en el mundo donde es habitual saludar con un beso, otros con dos o incluso con tres, pero también hay países donde “no se hace nada de esto”.

Cree este psicólogo que hay muchas “formas de mostrar buena educación” y que “no implican dar besos”. El motivo es muy claro, puesto que para los niños y niñas pequeñas “un beso o un abrazo puede ser algo más que un simple convencionalismo social”.

“En los niños, un beso o un abrazo son manifestaciones de cariño que no se le dan a cualquiera que pasa por ahí. Y está bien que esto sea así, que sean más selectivos y que miren bien a quién se acercan”, aclara. Es muy curioso que queramos que sean cariñosos con familiares con los que apenas tienen relación o que les resultan poco cercanos, pero luego les pidamos que sean cautos a la hora de irse con desconocidos.

El doctor Alberto Soler nos explica que “las criaturas no entienden de sangre y por mucho que tú le digas que esta es tu tía Antonia, si no conocen a la tía Antonia no van a correr a darle un beso o un abrazo”. El motivo es muy simple. Para ellos, este familiar “es simplemente una desconocida”.

* Si no ves correctamente este formulario, haz click aquí

Además, resalta este experto en crianza: “Si forzamos las manifestaciones de afecto, ¿qué les estamos enseñando? Que si un adulto les dice que tienen que dar un beso, tienen que ser obedientes y hacer caso”. Algo que no nos interesa inculcar a nuestros hijos si queremos a la vez prevenir cualquier tipo de acoso o abuso hacia ellos.

placeholder Los niños ven los besos con un gesto de cariño y no un convencionalismo. (Pexels/Rdne Stock Project)
Los niños ven los besos con un gesto de cariño y no un convencionalismo. (Pexels/Rdne Stock Project)

Porque, se pregunta Alberto Soler, “¿realmente queremos que se comporten así? O, ¿queremos que aprendan que solo ellas y ellos pueden decidir sobre su propio cuerpo y tienen derecho a decir cuándo quieren dar un beso y cuándo no quieren darlo?”.

Haciendo una comparación, asegura que nunca obligaríamos a nuestra pareja a dar un beso a alguien en contra de su voluntad ni tampoco nos gustaría que nos obligasen a nosotros a dar besos que no queremos. Por lo que nos recomienda que “apliquemos la misma lógica con los peques”.

Este experto en crianza y padre de tres hijos nos explica por qué no es una buena idea obligar a dar besos o abrazos a nuestros hijos. Aunque muchos se preguntan si no es un símbolo de buena educación, Soler apunta que es “un convencionalismo social que se aplica en algunos países”. Explica que hay lugares en el mundo donde es habitual saludar con un beso, otros con dos o incluso con tres, pero también hay países donde “no se hace nada de esto”.

Bienestar
El redactor recomienda