Los Gamazo prestan su finca para la próxima boda de la realeza

La familia gran ducal de Luxemburgo está viviendo un momento agridulce. Los Nassau-Weilburg acaban de recibir el golpe del divorcio del príncipe Louis y la princesa Tessy tras diez años de matrimonio, pero no todo son malas noticias para ellos. Mientras una pareja se rompe, hay otra que pasará pronto por la vicaría. Nos referimos a la princesa Marie-Gabrielle de Nassau y a Antonius Willms, una pareja de jóvenes, guapos y ricos con un gran 'pedrigrí'. Para su boda, que se celebrará en los próximos meses, los novios han elegido como escenario España, concretamente Málaga.

Tal como ha podido confirmar Vanitatis, la princesa Marie-Gabrielle y Antonius se darán el 'sí, quiero' en Llanos de Belvís, una finca ubicada en el municipio de Istán, cercano a Marbella. Pertenece a la familia de Anna Gamazo, esposa del empresario Juan Abelló, y cuenta con un extenso campo de olivos, con el que los Gamazo han creado una productora de aceite bajo la marca Belvís de las Navas. Aparte de este negocio, la finca también es muy rentable porque últimamente se está utilizando para la realización de celebraciones y eventos varios. La finca aparece descrita en la web como un lugar en "las vertientes de la Sierra de Las Nieves de Istán desde donde se avistan las costas de Marbella hasta el Estrecho de Gibraltar".

Pero... ¿por qué una princesa de Luxemburgo y un joven estadounidense elegirían una finca malagueña de los Gamazo para casarse? Para obtener la respuesta tenemos que fijarnos en los lazos familiares. Antonius, conocido por los amigos como Tono, es hermano de Marie-Caroline Willms, esposa de Sandro Gamazo Hohenlohe, sobrino de Juan Abelló y Anna Gamazo. Esto significa que Tono es cuñado de Sandro. Este último les ha cedido la finca de su familia a los novios para celebrar su enlace. Así queda patente en una conocida red social en la que aparece una fotografía de los novios junto al texto: “Muy contentos de que estos dos se hayan comprometido y celebren su boda en nuestra casa”. Junto a esta frase aparecen los hashtags 'Belvís de las Navas', 'Marie-Gabrielle, bienvenida a la familia' y 'el vuestro será un amor sin fin'.

¿Y quién es ella?

Marie-Gabrielle de Nassau no siempre fue princesa, a pesar de ser hija de un príncipe. Su padre, Jean, cuarto hijo de los anteriores grandes duques de Luxemburgo, Jean y Josefina Carlota, conoció a Helene Suzanne Vestur, su madre, en una fiesta y empezaron una relación sentimental. A pesar de que llevaban poco saliendo, Helene se quedó embarazada y los dos decidieron seguir adelante. Nueve meses después vino al mundo Marie-Gabrielle. Al ser una hija nacida fuera del matrimonio, no recibió ningún título. Cuando ella apenas tenía un año, sus padres decidieron casarse y al poco tiempo se convirtió en hermana mayor con la llegada de Constantin, Wenceslao y Carl-Johan.

A pesar de que sus padres ya estaban casados, el gran duque Jean no concedió tampoco ningún título a los hermanos de Marie-Gabrielle. El problema estaba en que la gran duquesa Josefina Carlota no aceptaba a Helene y jamás quiso conocerla. Con sus nietos fue un poco más permisiva y los veía de vez en cuando. No fue hasta 1995 cuando el anterior gran duque les cedió a los hijos de Jean y Helene el título de condes de Nassau. En 2004, el ahora gran duque Enrique decidió que sus sobrinos debían estar a la altura del resto de la familia y los convirtió en príncipes con tratamiento de Su Alteza. A pesar de este 'ascenso', siguen sin tener derechos dinásticos y no están en la línea de sucesión al trono luxemburgués.

Su historia de amor

Tras ya cinco años de romance, Marie-Gabrielle, quien ahora tiene 30 años, y Tono, de 28, han decidido dar este paso para afianzar su relación. Los jóvenes viven en Múnich (Alemania), pero se conocieron en Luxemburgo. Él estuvo formándose varios años en la European School of Luxembourg, después de cursar sus estudios universitarios en la universidad de St. Andrews, la misma en la que se conocieron los duques de Cambridge. Durante su estancia en el gran ducado, conoció a la que ahora es su futura esposa, pues ella suele viajar mucho allí para visitar a sus parientes. La pareja se comprometió el pasado mes de diciembre y tienen planeado casarse en los próximos meses en una boda que reunirá a todos los miembros de la familia gran ducal luxemburguesa en España.

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