Se archiva la causa contra el hijo del dueño de Pachá por desobediencia a la autoridad

La última noche de la temporada estival de 2013 Ricardo Urgell C. la recuerda muy bien. Lo que parecía que iba a ser una fiesta más para despedir esos meses de playa, descanso y ocio se terminó truncando hasta el punto de que el joven, hijo del dueño de la discoteca Pachá, terminó descamisado en el suelo y esposado por varios miembros de la Policía Local de Ibiza. ¿El motivo? Lo que los agentes consideraron una falta de desobediencia contra la autoridad motivada por la actitud violenta de Ricardo.

Según narraron testigos presenciales a Vanitatis entonces, Ricardo adelantó varios coches de la Policía con su moto cuando estos se disponían a hacer una sonometría en el hotel Destino Pachá Ibiza Resort. En ese momento los agentes se dispusieron a identificar al joven, que se mostró, según la declaración de las autoridades, muy poco colaborativo con las órdenes recibidas. Como resultado Ricardo acabó en las dependencias policiales, de las que salió horas más tarde y con el propósito de poner una denuncia contra el agente que lo esposó por supuesto abuso de autoridad y supuesta detención ilegal.

Pues bien, dos años después de aquel episodio, se ha celebrado el juicio que enfrentaba a los agentes con el hijo del empresario. Vanitatis ha tenido acceso a la resolución que ordena el sobreseimiento del caso y, por tanto, el archivo de la causa sin que Ricardo reciba condena alguna. El fallo deriva de la entrada en vigor de la reforma del Código Penal aprobada en julio de 2015 que implica la despenalización de la mayoría de las faltas, entre ellas la tipificada como falta de desobediencia leve a agentes de la autoridad.

Con esta decisión la familia Urgell puede volver a respirar tranquila. La detención de Ricardo fue una piedra en el camino de una saga que puede considerarse como la más importante del mundo de la noche a nivel nacional. Ricardo Urgell padre es uno de los empresarios más famosos de nuestro país por haber sido el artífice de las discotecas de las dos cerezas cuando en España la dictadura marcaba unos cánones de ocio que nada tienen que ver con los actuales. En 1967 Ricardo fue todo un pionero en locales de ocio que terminó haciendo de su paraíso hippy ibicenco un imperio de discotecas reconocido internacionalmente que se expandió con joyas, revistas y tiendas de ropa.

Ahora, con la nueva resolución que archiva la causa de su hijo, el show puede continuar, que cantaba Queen.

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