Por qué los diez años de matrimonio de Bustamante y Paula se nos han hecho largos

Fue un 22 de julio de 2006. Ese día, un David Bustamante algo más gordito y una espectacular Paula Echevarría contraían matrimonio en el santuario de Covadonga (Asturias). Por aquel entonces aún no habíamos oído hablar ni de su hija Daniella, ni de cómo él se enamoró de su trasero (atención al vídeo en el que ella lo cuenta) ni de muchas de las crisis maritales que les han querido achacar y que no han impedido que sean una de las parejas más estables (y amadas y odiadas) del panorama rosa de nuestro país. El cantante y la actriz están tan hechos el uno para el otro que casi nos cuesta verles separados. Es más, nos atreveríamos a decir que hasta nos cansa la vista y nos nubla la razón verles tantas veces, tan unidos, tan felices, tan pegajosos y tan enamorados. A veces hasta nos llega a dar un poco de envidia. Por eso hemos elaborado un listado de vídeos resumiendo su historia de amor y dando buenas razones por las que no podemos con ellos y a la vez nos encantan. Esperamos, claro está, que ellos se lo tomen, como nosotros, con mucho humor.

Porque se conocieron por un culo (el de ella)

Porque sus fans les hacen vídeos molones de su boda

Porque protagonizaron el videoclip más empalagoso jamás visto

Porque sus pullitas públicas nos suben el azúcar (y nos dan envidia)

Porque nos sabemos sus cuerpos de memoria a base de verlos cada verano

Porque no tienen broncas (solo de mentira)

Porque ya no sabemos contar las veces que los han llamado 'pareja perfecta' en los medios

Porque Bustamante no tiene paciencia para hacerle fotos a Paula en Instagram

Porque los abdominales de él son los más catódicos desde los de Cristiano Ronaldo

Porque en el fondo los queremos tanto como los que les hacen vídeos cursis (o lo intentamos)

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