De Kate Middleton a Letizia: las costureras privadas, un valor en alza en palacio

Tal y como confirmaba Vanitatis en su momento, una de las armas secretas para que los vestidos y trajes que lleva doña Letizia le sienten como un guante es una costurera privada. Además de su estilista, Eva Fernández, y su peluquera de confianza, la costurera -de momento, anónima- es la pieza última y fundamental en la cadena para que luzca perfecta. Ella se encarga de ajustar, coger bajos y modificar diseños que no son exclusivamente para ella -como son los creados por Felipe Varela- o 'retocar' algunas piezas que reutiliza años después de su estreno para que le sienten igual de bien, o incluso mejor que la primera vez. Pero también se ha lanzado ean alguna ocasión a crear ella misma algunas piezas para determinados actos oficiales, como este dos piezas de tweed que lució en la entrega de los Premios Nacionales del Deporte y en una visita a la Conferencia Episcopal.

Otro ejemplo sería el diseño que lució en la cena de gala en honor al presidente de Perú y que había estrenado en 2011 para la boda de Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton. Ocho años después, el vestido -con banda cosida incluida- lucía espectacular. También entraría en la categoría de 'modificados' un vestido de gala diseñado por Lorenzo Caprile, con falta en verde botella y cuerpo bordado. En 2006, el escote era tipo barco, mientras que en 2009 apareció con ciertos arreglos, con escote en V, tapando ligeramente los hombros.

Pero Letizia no es la única royal que echa mano de los servicios de una costurera privada. Según se han hecho eco algunos diarios británicos, todo apunta a que Kate Middleton también podría haber incorporado una modista personal a su equipo para que los diseños que ha lucido recientemente -dando un 'puñetazo' estilístico en la mesa- le queden perfectos. Todas las alarmas han saltado tras la recepción que ofreció la reina Isabel en Buckingham con motivo del 50 aniversario de su hijo Carlos como príncipe de Gales, en la que uno de los looks más esperados era el de Kate Middleton. El diseño escogido fue un vestido con largo midi, en color verde agua y abotonado hasta el cuello, que recodaba a una pieza que lució en Kuala Lumpur en 2012. Mismo color, mismo corte, misma tela, aunque con algunos detalles diferentes que podrían ser obra de la costurera más buscada.

Teniendo en cuenta que es una de las pocas ocasiones en las que no se ha sabido quién firmaba el diseño, todo apunta a que es creación de esta modista privada, que puede haberse convertido en el arma secreta de la duquesa de Cambridge para su particular y mediático duelo de estilo con su cuñada, Meghan Markle. Además, algunos medios, como el 'Telegraph', afirman que el recurrir a una costurera personal es un paso más en su particular carrera de fondo hacia el futuro trono, y tener así una identidad propia en cuanto a vestuario, tal y como viene haciendo desde hace décadas la reina Isabel con su incondicional Angela Kelly, quien asesora, diseña y supervisa todo el vestuario, tan icónico, de la monarca británica.