La regla de oro de doña Sofía en Marivent (y quién se la saltaba siempre)
La madre de don Felipe es la única que se mantiene fiel al lugar donde su familia ha vivido veranos inolvidables. Un pasado que ya nunca volverá
Quedan pocas horas para que los reyes Felipe y Letizia aterricen en Palma de Mallorca para pasar allí unos días de vacaciones. Célebres son las noticias sobre la desgana de la Reina cada vez que llega el momento de vivir su parte del verano 'más oficial'. Prueba de ello es aquella perla que soltó hace años a una periodista cuando dijo: "¿A ti esto te parecen unas vacaciones?". No ocurre lo mismo con doña Sofía. La Reina emérita ha demostrado, a lo largo del tiempo, una fidelidad absoluta al clásico lugar de vacaciones de la monarquía española de los últimos 40 años.
Este verano ya lleva unos días en la isla y ha participado en una jornada de limpieza del mar. No es la primera vez que muestra su querencia por Mallorca. El año pasado, por ejemplo, fue la última que abandonó el lugar en la última quincena de agosto. Acompañada de la princesa Irene, estuvo unos días más que Felipe y Letizia, que solo interrumpieron su descanso estival para estar presentes en el primer aniversario de los atentados de Barcelona, el 17 de agosto de 2018.
No es raro que casi todos los años alargue su estancia allí hasta el mes de septiembre. Se ha convertido en la 'guardiana de palacio' y los ciudadanos de Palma están más que acostumbrados a verla pasear por la calle Jaume III y acudir a El Corte Inglés, que es uno de los establecimientos fijos de su rutina. Otra visita habitual es la heladería Can Joan, donde solía acudir con sus hijos primero, y después con los nietos. Ahora lo hace con su hermana Irene y, a veces, con su prima Tatiana Fruchaud. También suele visitar el mercado l'Olivar, donde muchos de los puestos de pescado, verdura y fruta son proveedores de palacio. Fue este el lugar en el que se produjo una imagen muy especial el año pasado: la de la emérita junto a Letizia y sus nietas. Un escenario que sorprendió por su originalidad.
Un lugar lleno de anécdotas
Marivent ha sido durante muchos años la residencia de verano de la familia real. Los Reyes eméritos y sus hijos disfrutaban del mes de julio y agosto en Mallorca. Unas vacaciones donde lo habitual era ver al príncipe Felipe y a su hermana Cristina de copas por los lugares de moda. A veces, la infanta Elena se unía al grupo con sus amistades. Los cambios de estado civil de los tres añadieron yernos, nuera y nietos.
Para la reina Sofía, Marivent ha sido el lugar donde realmente ejercía de cabeza de familia en cuestiones domésticas. Una rutina que, hasta hace poco, obligaba a todos los miembros de la familia que se instalaban en palacio a desayunar juntos.
Después, cada uno organizaba su ocio como mejor le pareciera. El rey Felipe, mientras fue Príncipe, también cumplía con este 'requerimiento' de su madre, a la que siempre ha estado muy unido. Esta condición solo se la saltaba don Juan Carlos, que iba por libre. Él, en este caso, se reunía con el grupo de amigos que Sabino Fernández Campos (jefe de la Casa Real) definió como 'amistades peligrosas'.
Este calendario estival forma parte de una pasado que nunca volverá. Lo único que se mantiene es la fidelidad de doña Sofía al lugar donde ha sido más feliz.
Quedan pocas horas para que los reyes Felipe y Letizia aterricen en Palma de Mallorca para pasar allí unos días de vacaciones. Célebres son las noticias sobre la desgana de la Reina cada vez que llega el momento de vivir su parte del verano 'más oficial'. Prueba de ello es aquella perla que soltó hace años a una periodista cuando dijo: "¿A ti esto te parecen unas vacaciones?". No ocurre lo mismo con doña Sofía. La Reina emérita ha demostrado, a lo largo del tiempo, una fidelidad absoluta al clásico lugar de vacaciones de la monarquía española de los últimos 40 años.