Los royals las prefieren rubias: el 'noviómetro' de Marius Borg, el hijo de Mette-Marit

El díscolo primogénito de la princesa heredera de Noruega, Mette-Marit, es un especialista en llegar a los titulares de su país por las razones más variopintas. Si Marius Borg no provoca una crisis de seguridad nacional al compartir la ubicación de la familia real en Instagram, es cazado haciendo fotos al volante y sobrepasando el límite de velocidad. Pero lo que de verdad interesa a los noruegos son sus continuos y publicitados romances, que conforman ya una larga lista a sus 26 años. Además, el joven parece tener unas preferencias muy claras en cuanto a mujeres, como demuestran las similares características físicas de sus sucesivas novias.

No en vano, la revista 'Se og Hør' describía los últimos escarceos amorosos de Marius Borg con "coqueteo caliente con la doble de su ex". Para los poco versados en el 'timeline' sentimental del hijo de Mette-Marit, este rompía recientemente con la modelo e influencer Nora Haukland, algo que cayó en su país como toda una bomba mediática.

Su romance había sido seguido con mucho interés en su país y también fue noticia cuando llegó a su fin hace unos meses. Haukland no dudó en hablar abiertamente de la ruptura y no ha ocultado el dolor que le causó. El fin de su historia de amor llegaba cuando se encontraba en pleno rodaje del reality show 'Girls of Oslo', y ante la cámara pudo revelar lo difícil que le resultó la separación.

"Ahora mismo me siento como una mierda. Quiero que sea feliz y últimamente ya no siento que le haga feliz. No quiero sentir que tengo que cambiar todo de mí, porque eso solo hace que me mire al espejo y piense en todo lo que está mal en mí", dijo la modelo entre lágrimas durante uno de los episodios.

Haukland ha declarado que ahora se encuentra mejor que entonces y recientemente se publicaban fotos de ella con un nuevo interés romántico. Mientras tanto, Marius Borg no se ha quedado de brazos cruzados y en sus stories de Instagram se le puede ver montando a caballo en un entorno lujoso e idílico en Marruecos, junto a su nuevo ligue. Se llama Rebecca Helberg y guarda un extraordinario parecido con su ex.

Según los medios noruegos, la nueva novia del joven trabajaba en el club nocturno Michaels de Oslo, un lugar que Marius frecuenta a menudo. De hecho estuvo allí el pasado 25 de agosto, la noche en la que su madre celebraba en el Palacio Real sus 50 años. Entonces este se excusó diciendo que "no estaba en forma", pero posteriormente se le vio en una fiesta disfrazado de James Bond en ese club nocturno.

Retrocediendo en el historial sentimental de este galán escandinavo, encontramos a otra modelo y también rubia. En marzo de 2022, Marius Borg y Juliane Snekkestad rompían su larga y aparentemente estable relación, y lo hacían de forma poco amistosa.

"Marius y yo nos hemos separado. Y ahora me siento mucho mejor", aseguraba entonces Snekkestad, dando a entender que las cosas se habían puesto difíciles entre los dos, al menos para ella. La modelo lleva años luchando contra sus problemas de salud mental y meses atrás había confesado en una revista noruega que padece trastorno bipolar, algo que calificaba como "una maldita enfermedad".

Su relación con la joven modelo llegaba después de que volviera a estar en el mercado tras romper con la que fue su primera novia seria, y rubia por supuesto, la heredera Linn Helena Nilsen. Fueron vistos juntos por primera vez en Oslo en 2016 y posteriormente hicieron un viaje juntos por Estados Unidos.

Con una imagen bastante alejada de los cánones royal, luciendo tatuajes en los brazos y un estilo rebelde e informal a la hora de vestir, su trabajo también es inusual. Hasta la fecha ha hecho prácticas junto al diseñador alemán Philipp Plein en Milán, tuvo una colaboración con la revista británica 'Tempus Media Limited' y colaboró en una app para manejarse por la vida nocturna del país. Claro que su conducta poco habitual no puede extrañar mucho en la familia real noruega, ya que la propia Mette-Marit participó en un programa televisivo de citas cuando estaba soltera y embarazada de Marius.