Leonor y Sofía, objetivo conseguido: así se mantiene la privacidad de su vida académica

Martes, 20 de febrero en Zaragoza. Aniversario de la Academia General Militar. Varios fotógrafos están desplazados a la capital aragonesa para intentar obtener alguna imagen de la Princesa de Asturias durante esta celebración. Pero no hay suerte. Se cumple una vez más el objetivo marcado para la vida académica de Leonor y Sofía: mantener su privacidad a buen recaudo y cierta 'normalidad' en su día a día.

Don Felipe y doña Letizia pueden estar así contentos y satisfechos con la etapa vital y académica que atraviesan sus dos hijas. No solo por dónde está cada una, cumpliendo con lo esperado para sus respectivos roles futuros con soltura y buenos resultados, sino por estas dos metas que no han sido fáciles, desde luego. Especialmente teniendo en cuenta las circunstancias y que las dos hermanas Borbón-Ortiz han nacido en el seno de una familia real.

Pero el hecho de que pasen por sus actuales momentos vitales como dos chicas más y sin que las acompañe la sombra de ser las hijas de los Reyes, sin significarse, se ha conseguido. Al menos hasta la mayoría de edad de Leonor, ya que hay cosas, como ahora veremos, que son inevitables.

El último ejemplo claro de esto lo teníamos el pasado martes, durante el aniversario de la Academia Militar de Zaragoza, donde la Princesa de Asturias recibe formación desde el pasado agosto. Como hemos mencionado al principio, los fotógrafos y medios desplazados no lograron la ansiada imagen de Leonor, lo que hubiera sido un éxito seguro de ventas. El motivo: eran muchos los cadetes que participaban en el acto y ella pasó totalmente desapercibida. Leonor, a diferencia del día en el que juró bandera, el pasado octubre, no tuvo un papel destacado. Exactamente como una más.

Lógicamente, es difícil escapar a la atención mediática. Desde Casa Real son plenamente conscientes y por eso han querido que todo lo que hemos sabido del paso de la princesa Leonor por la Academia General Militar esté perfectamente controlado. Y lo que ha estado a punto de escaparse de sus manos se ha intentado reconducir.

Empezamos por ese 17 de agosto, el día en el que la Princesa de Asturias comenzaba su nueva etapa institucional con esa formación militar. Lógicamente, la expectación estaba servida y sí se facilitó el trabajo de los medios desde Zarzuela. Un mes después, también fue la propia Casa Real la que quiso distribuir fotos que resumían esas primeras semanas de Leonor.

En ese tiempo, hemos tenido noticias de las diferentes etapas que iba cumpliendo la heredera en su centro de formación. Y siempre se ha dirigido la misma pregunta a Casa Real para saber si se distribuirían fotos. La respuesta, que no era algo concerniente a la Casa, sino a la Academia, por lo que no estaban en disposición de proporcionar material gráfico.

Siempre o casi siempre las mismas palabras. Con una excepción. Hace un par de meses, Leonor comenzaba el entrenamiento de alta montaña en la estación de esquí de Astún. No estaba previsto que hubiera material, pero quiso la mala suerte y el buen trabajo de una fotógrafa que se escaparan unas imágenes de la Princesa de Asturias en su primera jornada allí. Horas después, eran muchos los medios que se reunían en el mismo punto para intentar conseguir el mejor material gráfico, mientras la propia Casa Real quiso distribuir unas pocas fotos para que no se disparara la atención mediática.

No lo consiguieron en esa ocasión, pero sí se pactó con los medios que, tras las primeras fotos de Leonor, se retiraran para no importunar ni al resto de compañeros ni a la propia Princesa o sus instructores, asegurando así al menos un par de jornadas de relativa tranquilidad.

Como decíamos al principio, hay cosas que son inevitables. Fue cumplir Leonor los 18 años y que esa mayoría de edad se convirtiera en una especie de permiso para poder fotografiarla a solas, sin sus padres y haciendo cosas 'normales' de su edad. No tardaron algunos fotógrafos en sorprenderla en una salida nocturna, junto a algunas compañeras por las calles de Zaragoza. Nada raro teniendo en cuenta que es una chica de 18 años. Volvemos a esa normalidad que los Reyes quieren dar a la vida de sus hijas.

Lo raro hubiera sido lo contrario, que no saliera con sus amigos. Igual que el hecho de que Zarzuela impidiese que se hiciesen o publicasen las pruebas gráficas de esta velada nocturna. Es la palabra: normalidad.

La privacidad de Leonor y Sofía, blindada en Gales

Pero si de la actual etapa formativa de Leonor hemos conocido algunas pinceladas -también porque los cursos siguen un patrón y es fácil saber cuándo empieza según qué maniobras-, de la anterior tuvimos que esperar dos cursos para tener imágenes de la Princesa de Asturias en el UWC Atlantic College de Gales. La Casa Real distribuyó unas fotos de su primer día y de la despedida familiar. No hubo más pruebas de su paso por el internado galés hasta el mismo día de la graduación.

Las redes sociales del centro muestran prácticamente a diario las diferentes actividades que hacen los alumnos del centro. Conferencias, escalada, trabajos sociales, concursos, encuentros gastronómicos... Todo lo que se les ocurra, es muy posible que lo hayan practicado los estudiantes del Atlantic College en las horas que no están en las aulas.

Y en estas fotografías, siempre vemos a los compañeros, antes de Leonor, ahora de Sofía. Pero nunca se ha tenido el mínimo atisbo de ninguna de las dos. Los Reyes son plenamente conscientes de que cualquier aparición en una red social generaría multitud de titulares. Desde la camiseta que puedan llevar a la forma en la que lucen el pelo. No hay necesidad, así que la premisa estaba clara desde el principio: nada de fotos en redes sociales.

Un patrón que se está repitiendo al dedillo con la infanta Sofía. El pasado agosto fuimos testigos, fotos mediante, de su despedida de los Reyes en Zarzuela y de los primeros pasos que daba en el Atlantic College. Nunca más se supo. Tendremos que esperar a mayo de 2025 para volver a ver a la hija pequeña de don Felipe y doña Letizia en tierras galesas. Una vez más, objetivo conseguido.