La hermana ‘chunga’ y heroica de Britney Spears

La princesa del pop nunca se ha caracterizado por su discreción. Su familia tampoco. A los escándalos que suma Britney Spears se unen los de su hermana Jamie Lynn que, a sus 23 años, ha sido captada esta semana por una cámara de seguridad empuñando un cuchillo en un altercado con dos jóvenes. Cualquiera pensaría que es una pandillera pero en realidad la joven intervino en una pelea en la que se vio involucrada su amiga para defenderla. Sin embargo, muchos piensan que el gesto ha vuelto a perjudicarla.

Todo ocurrió en el restaurante Pita Pit de Los Ángeles cuando un grupo de hombres empezó a discutir y la joven se quedó atrapada en mitad de la bronca. La hermana de la cantante de Toxic cogió el cuchillo y se plantó ante los camorristas para defender a su amiga de la incómoda situación que estaba viviendo. Un hecho insólito para una Jamie Lynn que siempre había destacado por su discreción en contraste con su descerebrada hermana.

La pequeña Jamie destacaba por las mismas virtudes que Britney tenía de pequeña: la danza, la interpretación y un gusto particular por el mundo de la televisión. Sus primeros pasos en series adolescentes la certificaron como una persona seria y muy contrastada con respecto a su hermana. Sin embargo, en cuanto la pequeña pantalla empezó a darle la espalda, siguió una senda parecida a la de la irreverente Britney.

Para empezar, fue objeto de un gran escándalo al quedarse embarazada con tan sólo 16 años. La cadena Nickelodeon tuvo que cerrar la serie que protagonizaba de forma precipitada con dos capítulos especiales antes de que se le notase la tripa. “Sabemos que este es un momento muy difícil para ella y su familia, y nuestra principal preocupación en estos momentos es su bienestar”, aseguraron desde el canal. En 2008 dio a luz y eso provocó que, ante la falta de trabajo y tras el declive de la serie Zoey 101, con la que había triunfado a lo grande y entre el público más naif, se entretuviese subiendo fotos a Twitter de ella con su retoño ante las críticas más despiadadas de muchos de sus ‘followers’. El retiro fotografiado en la Louisiana rural a la que se fue a vivir junto a su novio de entonces y padre de la criatura, Casey Aldridge, hizo que los comentarios fuesen feroces.

Como cualquier adolescente, la relación con Jamie no prosperó y la boda que habían organizado se canceló en marzo de 2009, terminándose su relación de manera definitiva en febrero de 2010. La prensa se encargó de mofarse de las idas y venidas de la pareja casi tanto como de su propósito de convertirse en una cantante de country. En marzo de 2013 ya había encontrado nuevo chico con el que casarse: Jamie Watson, que se convirtió en su marido en 2014.

Con apenas 23 años, la hermana de Britney se ha convertido en su digna heredera a la hora de copar titulares espectaculares y polemizar. Eso sí, sin llegar a los territorios de decadencia de la diva del pop. El cuchillo ha sido la punta de lanza de una vida errática de niña prodigio que no acaba de encontrar su lugar. Pese a todo, parece que aún le queda tiempo para llegar a los extremos de la famosa intérprete de Baby One More Time, que a este paso encaminada a ser el ejemplo perfecto de juguete roto.