Taylor Swift, demandada por una deuda de 1,08 millones con un agente inmobiliario

Cuando Taylor Swift se compró una vivienda en Manhattan, en el elitista barrio de Tribeca, lo hizo con toda la ilusión del mundo. Puso a la tarea a su equipo para que le ayudasen a encontrar la casa perfecta para ella y cuando la encontraron, la cantante no puso pegas en desembolsar los 18 millones de euros que la agencia inmobiliaria pedía por ella. Hasta ahí todo fue un cuento de hadas, dado que la artista no tuvo que romperse demasiado la cabeza a la hora de elegir su nueva residencia, porque había delegado el tedioso proceso en asesores personales y agentes inmobiliarios de Douglas Elliman.

El problema ha llegado cuando uno de esos agentes ha decido quejarse judicialmente que no ha cobrado la comisión que le correspondía. Por ello, no le ha temblado el pulso a la hora de sentar a Taylor Swift en el banquillo de los acusados para solicitarle ante un juez 1,08 millones de dólares que supuestamente le prometieron, lo que supone el 6% del precio de venta del inmueble de Manhattan. Así se refleja en la demanda interpuesta en un tribunal de Manhattan, por parte de un agente inmobiliario cuyo nombre no se ha desvelado.

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Taylor Swift tendrá que explicar ahora ante un juez como acusada por qué la persona que medió con sus hombres de confianza la transacción de esta vivienda no ha recibido su comisión. Quizá ella no sepa ni de qué le estén hablando, pero como firmante del documento de compra deberá responder ante la justicia de las acusaciones de impago que pesan sobre ella.

Y todo por ser una vecina más del exclusivo vecindario de Tribeca. Un barrio en el que ella ya tenía un penthouse, cuyo valor se estima en unos 20 millones de euros, y compartiendo calles con nombres tan populares como Meg Ryan, Justin Timberlake o Ryan Reynolds.